El 63% del ajuste fiscal de Astori se pagará con los aumentos al IRPF y al IASS.

Es hora de reuniones y más reuniones en el Frente Amplio, donde la mayoría de los sectores se oponen a la suba del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para la franja que va de $ 33.400 a $ 50.100, y como alternativa plantean el aumento de la carga impositiva sobre el capital, por ejemplo mediante el cobro de más Impuesto al Patrimonio.

El gobierno pretende que la gran mayoría de los recursos que procura obtener con el ajuste fiscal provengan del IRPF y, más específicamente, de su componente que grava los salarios. Concretamente, de los US$ 351 millones de ingresos que pretende obtener, US$ 283 millones provendrían del IRPF Categoría 2, que grava a los salarios. La información está en poder del Pit-Cnt que la utilizó para presentarle ayer al gobierno una propuesta alternativa.

Con el Impuesto a la Asistencia a la Seguridad Social (IASS) se obtendrían US$ 18 millones, en tanto otros US$ 100 millones los conseguiría el Estado con el IRPF que grava el capital y el Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas (IRAE). La disminución a 18% del Impuesto al Valor Agregado (IVA) con el uso de tarjetas de débito o mecanismos de pago electrónico supondrían para el Estado resignar US$ 50 millones. El gasto público caería en US$ 125 millones por lo que el monto total del ajuste sería en realidad de US$ 476 millones.

El equipo económico liderado por el ministro Danilo Astori y el subsecretario Pablo Ferreri mantuvo reuniones con el Partido Socialista, el Partido Comunista y la lista 711 del vicepresidente Raúl Sendic; todos estos sectores plantearon sus reparos con la suba del IRPF en sueldos más bajos y la unificación en 8% de la cuota para los deducibles. Además manifestaron su preocupación por el hecho de que la rebaja del IVA llegue a la población de menos ingresos.

Astori sostuvo que no existe la posibilidad de eliminar el incremento de 15% a 18% en la tasa del IRPF al tramo de salario que va hasta $ 50.100, porque no solo se afectaría el monto recaudatorio que se previó para la mejora de las cuentas del gobierno, sino que el beneficio alcanzaría a todas las franjas salariales. "El impuesto se liquida progresionalmente y si uno elimina franjas no está afectando solo a la franja que se elimina sino a la liquidación de todo el impuesto", explicó el ministro a radio Carve.

Pese a este punto de vista, el Movimiento de Participación Popular (MPP), la lista 711, el Partido Comunista y Casa Grande (sector de la senadora Constanza Moreira) preparan un paquete común de medidas que pasa por aumentar la carga impositiva de los sectores con mayores ingresos, por medio de una suba del Impuesto al Patrimonio. El senador Leonardo De León (lista 711) dijo a El País que la propuesta de su sector apunta a que "un millón de uruguayos no tengan que pagar la suba del IRPF". "Creemos que hay que trabajar más sobre el capital, fundamentalmente pensando que hay sectores de la economía que han aplicado mucha riqueza", afirmó. Además, una de las posibilidades que maneja el sector de Sendic es la creación de tres nuevas franjas para el cobro del IRPF. En la misma línea, el diputado Felipe Carballo (lista 711) dijo que se analiza "la forma de gravar al gran capital, por IRAE y Patrimonio y transferir el costo que hoy plantea el Ejecutivo a las franjas más altas del IRPF".

Por su parte, el Partido Socialista creó un grupo de trabajo con economistas para estudiar a fondo las medidas con el fin de "proteger todavía más a los sectores medios". Se estudia la división de la franja de IRPF que va de los $ 50.100 a los $ 167.000 y eventuales modificaciones en el mínimo no imponible del impuesto al Patrimonio. Así como la fijación de topes en posibles gastos excesivos de las personas públicas no estatales, según una carta que envió a dirigentes del sector la senadora y secretaria general Mónica Xavier.

El diputado socialista Roberto Chiazzaro dijo a El País que "la propuesta del gobierno tiene elementos positivos y otros que hay que ir corrigiendo. Nosotros creemos que el mínimo no imponible del Patrimonio baje para implementar la franja y después tenemos que analizar qué tasas se deben aplicar". El diputado socialista Gonzalo Civila dijo que "hay que profundizar en el plano de gravar más al capital, cuando hablamos de riqueza el Impuesto al Patrimonio es clave" .

El pasado miércoles, el Partido Comunista se reunió con el equipo económico para dar su opinión contraria en general al paquete de medidas presentado "por su impacto económico y también por sus consecuencias políticas", señala una resolución del sector. Los comunistas advierten que las medidas anunciadas unidas a los lineamientos salariales restrictivos, el aumento de las tarifas públicas, la inflación y el acotamiento de la inversión de las empresas públicas "lejos de tener un impacto contra cíclico tendrá un efecto recesivo adicional".

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El PCU planteó que no se aplique el incremento del IRPF a la franja que percibe ingresos de entre $ 33.400 y $ 50.100 y pidió analizar "con mucho cuidado" el impacto del tope de las deducciones al IRPF en un 8%. Asimismo se cuestionó por "insuficientes" los incrementos de los gravámenes planteados a las ganancias y la reducción de las exoneraciones tributarias para las zonas francas.

Hoy, a la hora 10.30, la senadora Constanza Moreira y representantes de Casa Grande se reunirán con el equipo económico. A su vez, una delegación del MPP también se entrevistará con el equipo económico para plantear alternativas a la suba del IRPF para las franjas más bajas. Una de las opciones que maneja el sector pasa por revisar algunas exoneraciones fiscales previstas en la ley de inversiones.

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Ayer por la noche, se escuchó en varios barrios de Montevideo un caceroleo convocado a través de las redes sociales contra la suba del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Se escuchó la protesta en Cordón y Parque Posadas, pero especialmente en Pocitos donde en las últimas elecciones municipales triunfó el Partido Nacional y resultó electo el alcalde Andrés Abt. "Hace unos años ganaba el FA en Pocitos, ahora le cacerolean", escribió en Twitter el economista Javier De Haedo. "Lamento profundamente que el caceroleo sea tan clarito por barrios", comentó en la misma red social el socialista Santiago Soto, presidente del Instituto de la Juventud.

El Ejecutivo Nacional del Partido Comunista expresó la necesidad de modificar los lineamientos salariales que según entienden en el nuevo escenario inflacionario determinarán una pérdida del poder adquisitivo del salario e indirectamente de las jubilaciones.

El PCU afirma que esto llevará a una redistribución regresiva del ingreso y terminará por contraer aún más el mercado interno, impactando negativamente sobre la actividad económica, el empleo y también sobre la recaudación del Estado.

El PCU reclamó la necesidad de incrementar la inversión pública y llevar a una política de compras que apoye a la producción nacional y genere empleo. También piden medidas que enfrenten el aumento de precios.

La Vertiente Artiguista considera que dentro de la Rendición de Cuentas se debería incluir la posibilidad de "topear un estrato de sueldos públicos de privilegio". Según afirma una resolución de la dirección nacional de ese sector del FA, la propuesta de "readecuación fiscal no debe recaer en los trabajadores y jubilados". Además piden priorizar el aporte de los sectores que tuvieron grandes ganancias en los 11 años de gobierno del FA, mediante diferentes instrumentos y agregan que deberán contribuir "los trabajadores y jubilados que tengan altos y muy altos ingresos". Sobre la propuesta del IRPF se plantea eliminar el aumento en la franja de hasta $ 50.100, y por dividir la siguiente franja (de 50.100 a 167.000).

PLAN DE AJUSTE DEL GOBIERNO