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El ladrón más buscado de Argentina cayó en el Centro de Montevideo

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De este penal se escapó el recluso junto a otros doce más, hace dos años. Foto: La Nación/GDA.
ENTRADA DEL COMPLEJO PENITENCIARIO FEDERAL NUMERO 1 .EZEIZA
MIGUEL ACEVEDO RIU/LA NACION

Un peligroso delincuente argentino que se había fugado de la cárcel de Ezeiza en agosto de 2013 y residía en el barrio de La Teja, fue capturado ayer en el Centro de Montevideo.

Mario Enrique Bagnera Paiva, de 40 años, había protagonizado una fuga cinematográfica del penal de Argentina, donde estaba procesado por varios asaltos. Luego de esa fuga, Bagnera fue sindicado como autor de un violento intento de robo a un camión de caudales en La Plata, en enero de 2014, donde hubo un tiroteo que terminó con la muerte de un jubilado que hacía fila en la puerta de un banco para cobrar su jubilación. Esa fue la última noticia que se tuvo sobre el delincuente mientras estaba en Argentina. Luego de eso, su rastro se perdió, hasta hace pocos días.

Por Bagnera, el gobierno argentino había ofrecido una abultada recompensa de $ 500.000 argentinos (un millón y medio de pesos uruguayos).

Denuncia anónima.

A través del 0800 5000, la policía recibió la información anónima de que un ciudadano argentino buscado por la policía de ese país, se encontraba viviendo en la zona del barrio La Teja. Por este motivo la Dirección de Información Táctica montó un operativo en conjunto con la Unidad de Operaciones Especiales de la Guardia Republicana que finalizó con la detención de Bagnera Paiva en la madrugada de ayer, próximo a las 2:30 horas, en la céntrica esquina de Ejido y Cerro Largo.

El hombre circulaba en un auto Peugeot 206, en compañía de una mujer que dijo ser argentina.

Una vez interrogado por personal policial dijo llamarse Richard Edinson Rivero. "Él ya tenía memorizado el nombre de un ciudadano uruguayo, número de cédula, fecha de nacimiento y los nombres de su padre y su madre", dijo el inspector Pablo Lotito, director de Información Táctica de la Jefatura de Policía de Montevideo.

Tras quedar en evidencia su verdadera identidad, Bagnera explicó que había "encontrado" ese documento y al ser físicamente parecido al mencionado Rivero, se apropió de ese nombre.

Posteriormente se realizó un allanamiento en su domicilio del barrio La Teja donde se detuvo a otra persona mayor de edad, quien manifestó ser hijo de Bagnera. Allí se incautaron dos armas, una pistola 9 mm y un revólver 357, además de municiones.

Según informó Lotito, el caso ya pasó a la órbita de Interpol.

La fuga.

Bagnera, junto con otros doce reclusos, se había fugado en 2013 de una cárcel de alta seguridad en la provincia de Buenos Aires. Entre los prófugos, había asesinos, ladrones de bancos y expertos escapistas.

Los evadidos, que estaban alojados en la celda 22 en un pabellón del módulo 3 practicaron un boquete en la losa del suelo y cavaron un túnel para pasar por debajo de los cimientos hacia un patio exterior. Debieron arrastrarse boca abajo unos cien metros hasta llegar al primer cerco perimetral de alambre tejido, que fue cortado con alicates; otros tres cercos sufrieron igual suerte, librando a los reclusos de los obstáculos que quedaban para ganar la calle.

En el patio exterior, entre el pabellón y las alambradas, debía haber un perro de vigilancia, que esa noche desapareció misteriosamente. Las cámaras de seguridad estaban fuera de funcionamiento y los sensores de los cercos perimetrales no se activaron.

La fuga generó un gran revuelo, forzó la renuncia del jefe del Servicio Penitenciario Federal y el desplazamiento de 19 guardiacárceles por falta de control.

Con el correr de los días, en forma sucesiva, once de los trece fugados fueron recapturados; uno de ellos murió en un enfrentamiento con la policía brasileña en Foz de Iguazú. Pero Bagnera Paiva y Martín Espiasse Pugh, condenado en Chubut por asesinar a dos policías, permanecieron prófugos hasta ahora.

La escandalosa fuga forzó la salida del entonces director del Servicio Penitenciario Federal, Víctor Hortel, y obligó al desplazamiento de 19 guardiacárceles por la falta de prevención y control.

En la página web del Ministerio de Justicia de la República Argentina, el hombre capturado ayer en Montevideo figura entre las 12 personas más buscadas. Se lo identifica como Mario Enrique "Bagnera" o "Bañera", indistintamente.

La recompensa que se ofrece por él, y por compañero de fuga Espiasse Pugh —un delincuente de nariz retorcida como la de un boxeador— son las más elevadas de los 12 requeridos.

Ideólogo de espectacular evasión de la cárcel.

Mario Enrique Bagnera Paiva, prófugo desde hace dos años y uno de los hombres más buscados en la vecina orilla, es considerado el "ideólogo" de la espectacular fuga de 13 reclusos del penal de Ezeiza, en agosto de 2013. Once de los 13 fugados fueron recapturados. "Creemos que Bagnera es el único de los evadidos que tenía los recursos económicos y la logística necesaria para planear la fuga", confió al diario La Nación un calificado investigador del caso. "Este delincuente, con sus actividades ilícitas, hizo mucho dinero", agregó.

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De este penal se escapó el recluso junto a otros doce más, hace dos años. Foto: La Nación/GDA.

Por su captura, se ofrecía una recompensa de $ 1.500.000

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