Le dispararon a la cabeza cuando estaba en una parada.

Pablo Porcal Algorta, un joven de 20 añosde edad, quien según la policía no registraba antecedentes penales, fue asesinado ayer a plena luz del día, en avenida Italia y Batlle y Ordóñez. Fue una típica ejecución de sicarios.

La víctima había llegado un rato antes en un ómnibus del servicio interdepartamental procedente de Salinas, según testigos. Se quedó en la parada a conversar con otra persona.

Un tiempo después un ómnibus se detuvo en esa parada y por la puerta trasera descendió un pasajero, mientras la moto con los sicarios a bordo se detenía al costado del vehículo. Uno de ellos bajó de la moto, dio la vuelta por detrás del ómnibus y sin dudarlo le disparó en la cabeza al joven y huyó. Todo en pocos segundos.

Las cámaras de videovigilancia de un comercio y del Centro de Gestión de Movilidad de la Intendencia registran todos esos detalles en la filmación a la que accedió El País.

En la parada había otras personas que por poco no fueron lesionadas durante el ataque.

Una vez cometido el crimen, el asesino siguió caminando por la vereda de avenida Italia. Tras avanzar unos metros se subió a la moto que lo aguardaba y siguió rumbo al Centro, de acuerdo con lo que dijeron los testigos del hecho y se pudo corroborar en las imágenes.

Varias personas que en ese momento estaban cerca de la escena del crimen no llegaron a percatarse de la situación que ocurría a pocos metros.

Testigos confirmaron que apenas sintieron un "ruido fuerte", como "de algo que se rompe". "Estábamos almorzando, ni nos enteramos de lo que pasó", dijo un vecino a El País.

El tránsito de una de las vías de avenida Italia debió ser desviado durante varias cuadras mientras se realizaban las pericias correspondientes.

El ataque ocurrió a la hora 13:00. Fuentes policiales confirmaron a El País que a varias cuadras del lugar agentes que iban en un patrullero se tirotearon con los delincuentes pero les perdieron la pista.

Al parecer, el asesino utilizó una pistola calibre 9 milímetros. No obstante, la pericia de balística estará pronta en la mañana de hoy, según confirmaron fuentes policiales.

En tanto, se supo que las únicas pistas que maneja la Policía son los registros de las cámaras y el testimonio de los testigos. Hasta ayer el autor y su cómplice no habían sido localizados por parte de la Policía.

En el lugar se hicieron presentes el juez Juan Carlos Fernández Lecchini, un importante equipo de Policía Científica junto a investigadores de la Zona Operacional II y de la Seccional 11ª.

Fernández Lecchini resolvió tomar declaración a los testigos en esta jornada. Además, dispuso la realización de la autopsia y que se le envíe toda la información que recolectaron en el lugar la Policía Científica y los profesionales que tuvieron que trabajar en el caso.

Hoy se consultará a la familia del occiso para saber si había sido amenazado o si tenía problemas con personas del barrio, así como conocer sus relaciones sentimentales.

Un joven de 18 años murió en la tarde de ayer en el marco de un tiroteo ocurrido en el barrio Marconi. Según informaciones preliminares, la víctima se encontraba junto a otra persona en el cruce de Iberia y Chifflet, cuando otras dos individuos en moto llegaron al lugar, dispararon sobre el joven y su acompañante, desencadenando un tiroteo. Como consecuencia del enfrentamiento falleció el joven y sus dos atacantes resultaron heridos.

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