Hoy no podrá contar con el Ejército; el sindicato y la comuna están lejos de un acuerdo.

La Intendencia de Montevideo está recurriendo a tres empresas contratadas y a dos organizaciones no gubernamentales (ONG) para limpiar la ciudad y espera que en algún momento de la próxima semana la situación esté normalizada, pero ya no podrá contar con la colaboración del Ejército que cesó sobre las 20 horas de ayer al entenderse que había terminado la emergencia sanitaria en la capital. Óscar Curutchet, director de Desarrollo Ambiental de la IMM, dijo a El País que la clave será que a partir de hoy se reactive la "recolección lateral" de contenedores para evitar que la situación vuelva a tornarse compleja. El funcionario reconoció que "hay un atraso grande en la zona Oeste" de Montevideo y que en el Este la situación está casi controlada. También reconoció que el ausentismo en la división Limpieza que siempre es muy alto sobre fines de año parece haber sido todavía superior este diciembre.

"Hubo camiones disponibles sin salir. El Ejército hizo una tarea muy importante, fundamental en varias zonas, que se prorrogó en seis horas pero ahora debe volver a sus tareas. Vamos a monitorear la situación para determinar si es necesario más adelante volver a pedir su colaboración. Lo fundamental ahora es que mañana esté toda la flota disponible", señaló Curutchet.

Es probable que en este mes se vuelvan a plantear situaciones conflictivas porque si bien el sindicato municipal montevideano (Adeom) decidió levantar por ahora sus medidas de fuerza, sigue lejos de firmar un convenio. La Intendencia, por su parte, quiere una cláusula de salvaguardia que condicione lo que se acuerde con el sindicato a que no caiga su recaudación.

Ayer el sindicato se reunió en el Ministerio de Trabajo con Eduardo Brenta, director de Recursos Humanos de la Intendencia, pero tras el encuentro las posiciones siguen distantes y habrá un nuevo encuentro el día 18 en el que la Intendencia deberá presentar una propuesta escrita. Una caldeada asamblea sindical posterior facultó a la conducción sindical a tomar medidas adicionales de protesta. En la asamblea llovieron críticas a la Intendencia por recurrir a militares para levantar basura y a su programa de obras, y se aprobó una moción que pide a la Junta Departamental que investigue cómo llegó a su actual déficit presupuestario.

El sindicato le reclama a la Intendencia que presupueste a unos 1.500 trabajadores contratados que, sostiene, cobran 30% menos que los funcionarios presupuestados que realizan su misma tarea. También pretende que las partidas que reciben los funcionarios se "salaricen" y no estén condicionadas a compromisos de gestión o capacitación, explicó a El País el integrante del Comité Ejecutivo de Adeom, Pablo González. El sindicato también pretende que durante el quinquenio haya ascensos, que ingrese personal y que la remuneración mínima en la Intendencia equivalga a, por lo menos, lo que llaman "media canasta básica" (aproximadamente $ 31.500).

Pero Brenta dijo a El País que el sindicato pretende subir el salario base y "nosotros no vamos a postergar obras" por dar aumentos porque "la mayoría de los trabajadores tiene una compensación digna, bastante por encima de la de los trabajadores privados y un conjunto de beneficios". La Intendencia quiere comenzar a presupuestar trabajadores en 2017 y no en este año y que las partidas sean variables y estén sujetas a compromisos de gestión, agregó. Además, la Intendencia quiere una cláusula de salvaguarda para que los beneficios caigan si su recaudación declina, algo que el sindicato no está dispuesto a discutir, al menos por ahora.

En la asamblea de Adeom en el Platense Patín Club llovieron las críticas a la Intendencia. El secretario general del sindicato, Camilo Clavijo, dijo que quería expresar su "total repudio" a que organizaciones no gubernamentales y empresas junten la basura. "Y menos con los milicos, compañeros, que todavía tienen los muertos, todos los desaparecidos", se quejó. Clavijo dijo que le genera "terrible calentura" que "vecinos y vecinas que a nosotros nos putean, salían y saludaban a los soldados". Clavijo recordó que "el Ejército le ha hecho mucho daño a nuestro pueblo". Otro asambleísta, William Rosadilla, fue más explícito y dijo que "nos metieron a los milicos, son unos traidores".

El sindicalista Álvaro Soto dijo que los militares solo limpiaron las inmediaciones de 2.500 contenedores y no 4.000 como informó la Intendencia y recordó que hay 11.700 en la ciudad. "No limpiaron ni la tercera parte. Falta personal permanente. La limpieza está en colapso", señaló. Soto sostuvo que el Fondo Capital supone "más endeudamiento" y que el intendente Daniel Martínez "adopta el programa de (Edgardo) Novick". "Nos van a poner por delante que no hay plata. Es mentira", sostuvo. Soto pidió no firmar un convenio sujeto a la recaudación de la Intendencia porque "firmaríamos algo que desaparece a los tres días".

Clavijo dejó entrever que la Intendencia dio señales de que cederá en parte. "Hemos logrado doblarle el brazo a la administración. Le demostramos a la administración que van a jugar al ritmo que nosotros queremos", aseguró. Cuando en diciembre se ocupó el sector de informática de la Intendencia "dimos el golpe donde lo teníamos que dar", sostuvo.

Calma pero solo por unos díasJ. P CORREA/ D. ISGLEAS