Temen que privados reclamen un aumento de aranceles.

Salto tuvo cuatro días de euforia. El departamento iba a tener el primer IMAE cardiológico del interior del país, luego de reclamar un centro de estas características desde hace casi 20 años. Al menos así lo había confirmado el ministro de Salud Pública, Jorge Basso, a la bancada del Frente Amplio el viernes. Sin embargo, una reunión ayer que se creía que tan solo iba a ser un trámite, se convirtió en un nuevo escollo.

Basso, la directora del Fondo Nacional de Recursos (FNR), Alicia Ferreira, y el asesor del Ministerio de Economía, Martín Vallcorba, recibieron a las 14 horas al presidente de la Federación de Prestadores Médicos del Interior (Fepremi), Carlos Cardozo, y al presidente del Centro Médico de Salto, Arturo Altuna. El encuentro empezó de una manera amistosa, hasta que los representantes del Ejecutivo empezaron a detallar las condiciones que se pedían para habilitar el IMAE.

Lo que estaba sobre la mesa era una propuesta presentada por Fepremi el 30 de marzo, por la cual el IMAE en Salto funcionaría como un anexo del que está en el Sanatorio Americano. Contaría con una guardia permanente, mientras que personal de la institución en Montevideo iría una vez por semana para hacer las intervenciones coordinadas. Fepremi se comprometía a arreglárselas con los aranceles que el FNR paga por cada intervención, y no pedir un aumento a futuro.

Sin embargo, lo que se le planteó a Fepremi en la reunión es que, además de comprometerse a no pedir un incremento, asegure que los otros IMAE, que están todos en Montevideo, no vayan a reclamar un aumento de lo que paga el FNR aduciendo que por la instalación del instituto en Salto pierden pacientes y se les hace inviable la inversión.

En la interpelación que le hizo el diputado nacionalista Martín Lema al ministro Basso en febrero pasado, Ferreira, del FNR, fue la encargada de hablar de la posibilidad de un IMAE en Salto. Dijo que aunque todos los pacientes que se atienden en estos centros sean intervenidos en ese departamento, igual el déficit sería de $ 13 millones.

"Ellos manejan temas que tienen que ver con la estabilidad del sistema que nosotros no podemos garantizar", dijo a El País el presidente de la mutualista de Salto, Altuna, consultado tras la reunión. En tanto, el presidente de Fepremi, Cardozo, señaló que esperaba que "todo fuera más rápido, que haya un visto bueno, pero no fue así, y el IMAE sigue sin estar habilitado".

Basso, en tanto, dijo ayer en rueda de prensa a la salida de la reunión, que "lo que se está conversando es que esto no implique dar más recursos al sector privado", porque ya "no hay más dinero para estos emprendimientos".

Altuna anunció ayer que se volverá a poner en movimiento a la Comisión Pro IMAE en Salto, que ya juntó 30.000 firmas y que había suspendido su cronograma de actividades el viernes tras la reunión de Basso con la bancada del FA.

En tanto, el diputado Lema manifestó a El País que el próximo 18 de abril presentará el tema, como tenía planeado antes del viernes, ante el Parlamento, donde la mayoría de los legisladores, incluso frenteamplistas, están de acuerdo con el IMAE. El representante nacionalista también convocará a Basso a la Comisión de Salud de la Cámara.

El MSP puso nuevas trabas a la instalación del IMAE luego de recibir una ola de críticas por preferir un centro de inversores privados, en vez del Hospital de Tacuarembó, que tiene todas las instalaciones y el equipamiento listos para empezar a funcionar, y que solo está a la espera de la habilitación.

El Sindicato Médico del Uruguay (SMU), el director del Hospital Maciel, Álvaro Villar, y el exsubsecretario de Salud Pública, Leonel Briozzo, fueron algunos de los que reclamaron por un IMAE en Tacuarembó, al igual que legisladores de todos los partidos.

Basso sostuvo que más que un IMAE lo que se debe instalar allí es un centro de referencia en cardiología, pero advirtió que aunque se cuenta con la infraestructura y el equipamiento, todavía queda por solucionar el tema de dotar de recursos humanos al hospital.

Cada año se hacen unas 2.000 cirugías cardíacas que son financiadas por el FNR, según se advierte en la página web del organismo. Las cirugías se realizan en los IMAE. Son tratamientos para adultos (cardiopatías isquémicas, enfermedades valvulares y de la aorta) y para niños (en su mayoría cardiologías congénitas). Hoy hay seis centros de estas características, todos en Montevideo, cinco privados (Instituto Nacional de Cirugía Cardíaca, Asociación Española, Instituto de Cardiología Infantil, Casa de Galicia y Sanatorio Americano), y uno público, en el Hospital de Clínicas.

CARLOS TAPIA

GIRO INESPERADOCARLOS TAPIA