Fue el primero de carácter estatal que se diseñó y forestó en el país.

En 2016 se cumplen 100 años del Parque Roosevelt y de la plantación allí del primer árbol, un eucalyptus botryoides, al que se sumaron a lo largo del tiempo más de 500 mil eucaliptus de 24 clases diferentes, 700 mil pinos, bosques de acacias, robles, ceibos y 2 mil palmeras, totalizando unos 2 millones de árboles.

En celebración de la fecha, a manera simbólica, el pasado martes se plantó un eucalyptus y un canelón, árbol éste que crece en los montes de Uruguay.

En la ocasión, la Intendencia de Canelones presentó la agenda de eventos que se extenderán hasta 2017, ya que el parque fue inaugurado en diciembre de 1916. Habrá casi una veintena de actividades culturales, deportivas, académicas y recreativas, planeadas junto con la sociedad civil.

El Roosevelt es el primer parque estatal creado en Uruguay, propiedad del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, que lo cedió en comodato a la Intendencia de Canelones. Anteriormente se lo conocía como Parque Nacional de Carrasco y Parque Nacional Centenario. Al fin de la Segunda Guerra Mundial, en 1945, resultó rebautizado Franklin Delano Roosevelt, en homenaje al presidente de los Estados Unidos.

El terreno fue donado por Alfredo García Lagos, y en su superficie inicial comprendía 1.142 hectáreas de bañado, médanos y esteros, y 350 de campo.

El donante puso por condición que el Estado desecara el bañado y procediera a su forestación. De eso y del diseño se encargó el paisajista francés Carlos Racine, quien mucho contribuyó también a la estética vegetal montevideana, con su proyecto para el Prado y la realización del Rosedal, por ejemplo.

Con algunos peones y pocos recursos económicos, la obra del Roosevelt se consagró luego de 20 años. Hubo que trazar kilómetros de zanjas y canales para la desecación y salida de las aguas, y plantar árboles capaces de perdurar en los arenales.

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