El Partido Nacional decidió denunciar ante la Justicia penal a Ancap por presunto delito de fraude, como consecuencia de la compra de publicidad por US$ 5.000 a una radio comunitaria de Quebracho (Paysandú) que, al momento de autorizarse la orden —mayo de 2014— no existía.

El dinero tenía por destino real comprar en el exterior los equipos para comenzar a transmitir, según confirmó el propio responsable de la emisora, el dirigente frenteamplista Enrique Correa, afiliado al Partido Comunista. La frecuencia fue entregada a Correa a través de un concurso por el Ministerio de Educación y Cultura.

Correa realizó la importación de los equipos y en mayo de 2015 —un año después de haber recibido el pago de Ancap por seis meses de publicidad— la radio comenzó a trasmitir.

Si no puede ver el documento haga click aquí 

El inicio de la transmisión comenzó durante la campaña municipal, a la que Correa comparecía como candidato a alcalde de Quebracho por el Frente Amplio.

Ahora, para los nacionalistas, se cometió un presunto fraude porque el dinero se entregó para publicidad en distintos informativos de la radio, según la resolución del directorio de Ancap, a la que accedió El País.

"El presidente del ente (José Coya) sabía que la radio no salía y durante un año hubo tráfico de información, de correos electrónicos, enviando las pautas publicitarias", explicó a El País el senador nacionalista José Carlos Cardoso.

Debido a que el Partido Nacional cree que hay "otros elementos" que pueden seguir el mismo camino, esperarán a reunirlos para presentar todo junto al juzgado, indicó. "Si el ente sabía que la radio no existía y hay una resolución del directorio pautando publicidad de mañana y a mediodía, eso es fraude", subrayó.

Fuentes del sector del vicepresidente Raúl Sendic indicaron a El País que "no consta" que la resolución de otorgar la publicidad haya sido del directorio y, más bien, se piensa que podría haber sido tomada por la gerencia de Relaciones Institucionales de la empresa, a cargo del gerente Pablo Bernengo.

El pasado 30 de septiembre, Bernengo acudió a la comisión investigadora y dejó en claro que Coya y el resto de los directores de Ancap autorizaron el pago de esos US$ 5.000 a la radio. El gerente contó a los senadores que primero "la gente de Quebracho le plantea a Ancap la posibilidad de que le dé los US$ 5.000 para comprar los equipos. Me comuniqué con ellos y les planteé que la empresa no les daba plata para la compra de los equipos. Luego, me llega una propuesta de la radio planteando el auspicio por seis meses por presentación y cierre de los programas principales por US$ 5.000. Consultamos, porque (la propuesta) había venido de la presidencia de Ancap, y se nos dijo que habían recibido a esos señores —no sé si los recibió el director Coya— y plantearon la resolución de la compra de la publicidad. Lo que hice —y lo tengo porque lo hablé con los directores de Ancap— fue llevar toda la información, el mail de la presidencia de Ancap, las facturas que la radio de Quebracho le hizo a la agencia de publicidad, los correos donde la agencia le enviaba el material para publicar y el de la radio, comunicando que lo había publicado. Hasta ahí llega la información que tengo. No pude constatar que la radio no trasmitía. No son radios que se auditen y no fuimos hasta Quebracho".

En la sesión de la comisión del 1° de septiembre, el presidente Coya fue consultado sobre la publicidad y señaló que "las propuestas específicas de publicidad vienen desde el lugar técnico (la gerencia a cargo de Bernengo) y se supone que se aprueban no por resolución de directorio pero a la vista de todos los directores, incluyendo al presidente".

En el caso de la radio de Quebracho, sin embargo, una resolución del directorio del 22 de mayo de 2014 (resolución 729/5/2014) otorga publicidad aún un año antes de salir al aire, bajo las firmas del presidente Coya y del secretario general de Ancap José Tato.

Ayer, el vicepresidente Raúl Sendic dijo que no tenía información sobre el caso, pero que si era enviado a la Justicia será en ese ámbito donde se diluciden las responsabilidades. "Habilitamos la investigadora para que indague porque no tenemos nada que ocultar", dijo.

vea el documentoDANIEL ISGLEAS