Después de reclamar 31 años por un concurso perdido, un funcionario de la Cancillería será ascendido a ministro y cumplirá funciones en el Vaticano. Por vía presupuestal se creará un cargo exclusivamente para él, con el objetivo de evitar una "catarata" de reclamos judiciales de otros diplomáticos.

El funcionario presentó innumerables recursos en el Ministerio de Relaciones Exteriores, luego de que perdiera un concurso de ascenso de grado en el año 1983. Se trata de un funcionario que ocupa el cargo de secretario de primera y tiene actualmente 65 años. Para jubilarse tiene que trabajar cinco años más.

En su comparecencia en la comisión de Presupuesto integrada con Hacienda de Diputados, el canciller Rodolfo Nin Novoa explicó que muchos de los reclamos realizados por el funcionario "tienen cierto grado de fundamento". "Esto viene desde hace muchísimos años. El Estado podría ser condenado fuertemente. Esto traería una catarata de readecuaciones y de reclamos porque movería mucho los escalafones diplomáticos", advirtió el canciller.

Nin Novoa explicó que se decidió crear el cargo exclusivo para este funcionario, luego de alcanzar un acuerdo para que "retire todas las demandas que el Estado está a punto de perder y que perdió. Esto viene desde el año 1983, es decir, lleva treinta y un años; esto no se ha podido arreglar. Entonces, nosotros lo vamos a arreglar de esta manera". El hombre pasará a cobrar US$ 25.000 anuales.

La decisión de crear el cargo se tomó en base a informes de la Oficina Nacional del Servicio Civil. "Nos dicen que esto hay que arreglarlo de alguna manera porque, de lo contrario, el Estado pierde", explicó Nin Novoa.

El encargado del despacho de la Dirección de Asuntos Jurídicos, Augusto Montes de Oca, señaló que el caso de este diplomático es "muy común" en el régimen de carrera de la administración pública, en virtud de las sentencias anulatorias que dispone el Tribunal de lo Contencioso Administrativo. "Como ustedes saben, nuestro sistema anulatorio establece que el Tribunal de lo Contencioso solamente puede confirmar o anular actos administrativos (...) Eso tiene algunos defectos. Uno de ellos es que desde que se dicta el acto legítimo hasta que se anula, pasan años, y durante este período la administración continúa funcionando, los concursos se siguen realizando y los funcionarios continúan ascendiendo", acotó.

A nivel de funcionarios, el Presupuesto equipara los sueldos de los embajadores residentes en el exterior, con los que viven en el país y tienen dedicación full time. Por otra parte, el artículo 244 establece los 35 años de edad como tope para el ingreso al Servicio Exterior.

Nin Novoa explicó que actualmente "el Estado está formando a una persona que a los pocos años se va a retirar. Inclusive, una persona que a los 55 esté ocupando un cargo de secretario de tercera puede sentirse disminuido ante otra persona que ocupe el mismo cargo con 25".

Un funcionario fue ascendido después de 31 años de espera