La Fiscalía remitió un proyecto de ley con modificaciones al Código del Proceso Penal.

A dos meses de que entre a regir el nuevo sistema penal acusatorio, el fiscal de Corte, Jorge Díaz, envió al Parlamento un proyecto de ley que modifica el Código del Proceso Penal y deroga la libertad condicional.

En la exposición de motivos —a la que accedió El País— se plantea la necesidad de realizar cambios debido a que el Código del Proceso Penal (aprobado en diciembre del año 2014) "es sustancialmente mejor al que se encuentra vigente en la actualidad, pero no llega a plasmar un sistema verdaderamente acusatorio".

La nueva iniciativa —que fue entregada a las diferentes bancadas en el Parlamento y aún no ingresó formalmente a la Comisión de Constitución y Códigos del Senado— plantea la derogación de la libertad condicional, bajo el argumento "que se trata de un instituto que no se compadece con la lógica de un sistema acusatorio, donde la regla es que la persona espere su sentencia en libertad".

Si se aplicara el Código tal como fue aprobado en el Parlamento, sin estas modificaciones y con la regulación de la libertad condicional, "un gran número de personas serían alcanzadas por la aplicación de este instituto y no se verían privados de su libertad en ningún momento, ni como medida cautelar ni como pena", reconoce la Fiscalía de Corte en la exposición de motivos del proyecto remitido al Parlamento.

Está situación viene siendo denunciada hace tres años por el fiscal de Corte Gustavo Zubía de forma pública. El problema surge porque el sistema inquisitivo (que se aplica actualmente) establece que cuando una persona es procesada va a prisión; mientras que el nuevo (acusatorio) establece la libertad como regla hasta que llega la sentencia condenatoria, momento en el cual se resuelve la reclusión.

El inconveniente se centra en que el nuevo Código del Proceso Penal vincula la libertad del proceso inquisitivo con la libertad del proceso acusatorio, explicó Zubía. "Mezclaron o sumaron la libertad del inquisitivo, más la libertad del acusatorio y la consecuencia es que hoy por hoy, si se aplica esto, los delincuentes tienen el 95% de probabilidad de no quedar nunca presos", explicó el fiscal. Según dijo, este problema da cuenta que "somos una mala copia del proceso acusatorio".

Según Zubía, este sistema "es una irracionalidad" tal como estaba planteado, por lo que se pregunta por qué se resolvió cambiarlo a último momento, cuando faltan apenas dos meses para la aplicación del Código. Por este motivo, la Fiscalía de Corte está proponiendo aplazar la entrada en vigencia (prevista para el 16 de julio) hasta noviembre.

El proyecto con modificaciones también propone la eliminación de la suspensión condicional de la ejecución de la pena por las mismas razones expuestas acerca de la libertad condicional. Además, se suprime la referencia a los institutos por los que la persona privada de libertad puede ser liberada.

Con la aplicación del nuevo Código de Proceso Penal será el fiscal y no el juez el que dirija la investigación.

Entre las modificaciones planteadas se detalla la función de los fiscales para "dirigir la investigación de crímenes y delitos", lo que incluye conducir la actuación de la Policía, la Prefectura Naval y la Policía Aérea.

Además se establece la prohibición de aplicar los institutos de "mediación extraprocesal" y "acuerdo reparatorio" a los casos de violencia sexual y por motivos de género con el objetivo de evitar la revictimización de las personas ofendidas. Esto, debido a la posibilidad de que la víctima tenga que enfrentarse nuevamente ante quien la atacó, abusó y "ejerciendo una relación de poder, la puso en una situación de absoluta vulnerabilidad".

El proyecto de la Fiscalía también propone la derogación del careo como medio de prueba, ya que el mismo no se corresponde con un sistema acusatorio. El argumento en que se basa para hacerlo, es que "constituye un medio poco confiable donde la personalidad más fuerte puede imponerse a la otra, de lo cual no puede inferirse la verdad de un hecho".

Uno de los puntos más novedosos del nuevo Código de Proceso Penal apunta a la realización de juicios orales. Con respecto a esto también se proponen cambios por parte de la Fiscalía para regular mejor el proceso. Se pide crear "una audiencia de control de acusación" para evitar la realización de juicios orales sin la suficiente evidencia que respalde la acusación. De no aplicarse este sistema, el caso llegaría a juicio oral y recién en ese momento procesal el defensor podría presentar la prueba.

Asimismo, se proyectan algunas reformas que tienen por objeto compatibilizar el sistema acusatorio que comenzará a regir en el proceso penal con las estructuras procesales por las que se tramitan otro tipo de acciones, como el proceso de adolescentes infractores, la ley de faltas y el código infraccional aduanero.

En cuanto a la forma de documentar las audiencias, se establece el registro en audio y video como regla, evitando "el desgaste de recursos registrando en actas aquellos que puede guardarse de otra forma".

En una nota remitida al Parlamento el pasado 28 de abril, la Suprema Corte de Justicia da cuenta de que no hay tiempo para realizar todas las modificaciones que se proponen al Código del Proceso Penal. Por ejemplo, indica que no tiene los recursos financieros necesarios para implementar un sistema de doble juez que no fue contemplada en la Rendición de Cuentas.

Por su parte, la Asociación de Fiscales envió una carta a Díaz advirtiendo de la existencia de dudas para la implementación del nuevo código "tanto por problemas legislativos como operativos". Por ejemplo, se prevé un solo fiscal de turno (con su equipo) para todo Montevideo durante los turnos nocturnos, lo cual es considerado "insuficiente".

VALERIA GIL

LAS DIFERENCIAS ENTRE LA CORTE Y LA FISCALÍAVALERIA GIL