EXPLOSIONES DE CAJEROS

La decisión fue de Banred; el BROU todavía no lo considera.

Desde ayer, más de 20 cajeros automáticos de Banred no permiten acceso al público entre las once de la noche y las siete de la mañana. Esto se debe a los ataques perpetrados por una banda de delincuentes contra estas máquinas para robar dinero en las últimas dos semanas.

Estos cajeros están ubicados en zonas "críticas". Es decir, no tienen un gran número de transacciones o están muy lejos de las viviendas, informó una fuente de la empresa a El País.

Esas terminales también han sufrido algún tipo de vandalismo: le rompieron el vidrio con piedras, intentaron destrozar la máquina o robaron la cámara de videovigilancia.

Después de las 23:00, personal de seguridad contratado por la red trancará la puerta con llave. Si alguien intenta forzarla, sonará una alarma.

Si bien comenzaron con unos 20 cajeros, el número puede aumentar en las próximas horas. El área de seguridad de esta empresa analiza cuáles son los cajeros más susceptibles de sufrir este tipo de incidentes.

La destrucción de estos cajeros le cuesta entre 4.000 y 8.000 dólares, dependiendo del proveedor y el país de origen, informó Canal 4.

Los cajeros del Banco República (BROU) no tendrán una medida similar, según informó a El País Eduardo Barbot, subgerente general de la institución.

No obstante, sus autoridades están en alerta por esta situación en los más de 400 cajeros que tiene el banco en todo el país. "Estamos permanentemente viendo las mejores prácticas de prevención en insittuciones bancarias de otros países", indicó Barbot.

Esta situación es nueva para el BROU ya que solo "dos o tres cajeros" sufren roturas por año, sumado a "algunos rayones". "Eso ha bajado en los últimos tiempos. Hoy son hechos puntuales", agregó Barbot.

Desde hace dos semanas, "la banda del gas" atentó contra cuatro cajeros automáticos. Si bien cada detonación no fue idéntica a la otra, en general utilizan una garrafa y una manguera con la que llenan el recinto de gas y mediante la generación de una chispa provocan la detonación. En el primer caso se llevaron 3 millones de pesos y en la segunda oportunidad 2 millones. En las restantes no pudieron llevarse billetes.

Para prevenir estos hechos, el Ministerio del Interior intercambia información con países vecinos, ya que esta modalidad delictiva es frecuente en países como Chile y Argentina.

Las pistas que sigue la Policía están basadas en videos de cámaras de seguridad.