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A punto de cumplir 40 años en el mercado, la compañía inauguró su segunda casa, esta vez en el interior del país.

Antonio Larronda

«La primera idea fue expandirnos dentro de Montevideo, pero al estudiar el mercado vimos que está desarrollado y buscamos otros destinos», explicó Roberto Ruglio, director de la óptica y segunda generación el frente de la empresa. Tras analizar varios puntos del Interior, se identifició que en este mercado se podía «marcar un diferencial», acotó.

Roberto lidera la expansión junto a su padre, Homero Ruglio, y explicó que no se trata de una franquicia de la empresa sino que es un local propio. «Queremos ofrecer la misma experiencia que tenemos en Montevideo. Por eso, nos turnamos con mi padre para ir una vez por semana», comentó.

La apertura del local fue el 27 noviembre e insumió una inversión de US$ 50.000. La nueva casa ocupa unos 110 metros cuadrados y está ubicada sobre la avenida General Flores, frente a la plaza de deportes (a dos cuadras de la terminal portuaria y de ómnibus).

El local ofrece cerca de 300 pares de lentes de sol y más de 500 opciones en lentes de receta. También sumará dos laboratorios completos, uno de lentes de contacto y otro de lentes de receta, apuntó el director.

A juicio de Ruglio, ganarse el mercado no será fácil porque el coloniense apuesta mucho a lo local. «Por ello, al frente de la nueva casa está una técnica de origen coloniense», remarcó.

Con este nuevo bastión, comienza una etapa nueva en la empresa, que seguirá en 2018 cuando cumpla 40 años y abra una tercera casa, con ubicación aún no definida.