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Creadores de Pampa BBQ llevan asado argentino a domicilio en Silicon Valley

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Cuestión de tiempo. Lo que más llama la atención en EE.UU. es que se invierta tanto tiempo en cocinar carne. (Foto: Gentileza Pampa BBQ)

La firma avanza ahora con un proyecto para montar su primer restaurante en California.

Dicen que en Silicon Valley se respira emprendedorismo. Ahora también es posible respirar aroma de «asado a la Argentina».

Hace algo más de un año y casi «a la deriva», Ignacio Viau eligió resignar la zona de confort que había construido en Buenos Aires (el estudio jurídico que montó junto con sus socios, sus amigos y hasta la familia) para ir a San Francisco, California. El plan original era perfeccionar un inglés «muy pobre». ¿El resultado final? El nacimiento de Pampa BBQ, asado argentino a domicilio.

«Tenía dos pasiones: la música y el surf (que cultivó en su Mar del Plata natal), y allá me quedó en claro que lo mío no era ser abogado sino emprendedor», cuenta Viau.

Pampa BBQ nació casi por casualidad. Francisco Gálvez, un salteño que vive en San Francisco desde hace tiempo, fue el que propuso «hacer algo» (hoy en la sociedad también está el brasileño Vinicius Delgado Bezerra). «A Francisco le encanta asar. La idea de hacer asado a domicilio se le ocurrió a él, que ya tenía todo el know how necesario: sabía desde dónde conseguir la carne —con los cortes que consumimos acá— hasta dónde alquilar las parrillas», relata Ignacio.

Viau recuerda que una de las primeras cosas que incorporó en Emprending de la UBA (un curso para emprendedores) es que lo primero que hay que hacer con una idea es validarla: «Es clave saber si el proyecto que pensaste está bueno y si la gente lo quiere».

El ensayo fue mediante Facebook. Crearon una página y esperaron. Por cada click que recibieran, debían pagar un dólar. «Pagamos US$ 80. Esa fue nuestra primera inversión», recuerda entre risas.

Fue entonces cuando eligieron el nombre definitivo —Pampa BBQ— y subieron la apuesta: invirtieron US$ 300 para publicar en Yelp (un sitio colaborativo de recomendaciones muy popular en EE.UU.).

El grupo llega al lugar con vestimenta gaucha, mate bajo el brazo, y folklore para amenizar la espera.

Sin importar si se trata de un casamiento, un evento empresarial o un encuentro entre amigos, la pregunta se repite: ¿por qué «perder» tanto tiempo para cocinar carne?

Según Viau, entonces explican que se trata de un ritual, una tradición que se transmite de padres a hijos y que consiste, más allá de la cocina, en compartir un momento. «Para el norteamericano promedio el tiempo es plata, y dedicarle tres horas a lo mismo que ellos resuelven en 20 minutos resulta extraño», dice.

Casa propia.

Un año después de haber arrancado la aventura en tierras californianas, el trío de emprendedores busca ahora inversores para concretar sus próximos objetivos: abrir una «steak house» en San Francisco y un restaurante propio a puertas cerradas.

Pero mientras esto sucede, no se quedan quietos. En paralelo también estudian cómo instaurar cursos de capacitación para los interesados en aprender la técnica argentina para asar.

Con la mirada puesta en seguir creciendo, los argentinos de Pampa BBQ sueñan con que el perfume del «asado a la Argentina» se multiplique en San Francisco, cuna de los emprendedores del mundo. Ellos ya dieron el primer paso para transformarlo en realidad. (La Nación / GDA)

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Cuestión de tiempo. Lo que más llama la atención en EE.UU. es que se invierta tanto tiempo en cocinar carne. (Foto: Gentileza Pampa BBQ)

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