En su segundo mandato en la CUTI, impulsará la exportación y la regulación del teletrabajo.

Desde ayer, Álvaro Lamé está nuevamente al frente de la Cámara Uruguaya de Tecnologías de la Información (CUTI). Reconoce que llega a su segundo mandato, con más experiencia, un mejor equipo de trabajo con «empresas de gran porte» para afrontar problemas nuevos. Se refiere a la innovación, la falta de capital para nuevas empresas y otros «históricos» como la necesidad de mejorar el marco regulatorio y la escasez de recursos humanos, que identificó como el mayor debe de un sector con «desempleo cero». Lo que sigue es un extracto de la charla que mantuvo con El Empresario.

—¿Cual será el principal punto de su agenda de trabajo en esta nueva etapa?

—El principal tema que ocupa y preocupa al sector sigue siendo la falta de recursos humanos. Es una industria con «desocupación cero» hace 15 años y provoca que las empresas salgan a buscar personal afuera. Sucede en distintos niveles, desde ingenieros y programadores hasta los que hacen testing, u otros tipos de carreras funcionales al sector, como contadores, expertos legales, etcétera. Lo primero que queremos hacer es volver atractiva la industria para los jóvenes, mostrarles que desde acá se pueden cambiar las cosas. Vamos a trabajar a nivel de secundaria, hablar con las universidades, con la UTEC, y con el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop) para que trabajen juntos, formen personal para la industria y no se pisen en proyectos de formación. Buscaremos que los universitarios hagan sus trabajos de grado pensando en un producto que necesite una industria. Y que luego, al egresar, puedan ingresar como startup incubada en la empresa por un año, tras lo cual la compañía podría elegir si invierte en el emprendimiento o no.

—¿Y cuáles son los nuevos temas a atender?

—Hay varios temas nuevos, como promocionar la innovación e impulsar capital ángel de inversión para nuevas empresas. Para esto último, creo que sería bueno generar beneficios desde el Estado para estos inversores, como descontar un porcentaje de lo invertido del impuesto a la renta. Teletrabajo es otro foco que abordaremos. Queremos que se regule, que exista una ley, porque no hay controles. Crear mecanismos que den garantía tanto a la empresa como al trabajador de que no afectará a ninguna de las partes. Por ejemplo, un teletrabajador que trabajó para una empresa por dos años, al culminar, si presenta los mails que envió desde la mañana a la noche puede reclamar horas extras. Al regularlo, podremos incentivar a la gente del Interior que trabaje para empresas de Montevideo sin que tengan que moverse. Esto resuelve también en parte el problema de los recursos humanos. También impulsaremos que se exoneren impuestos a aquellas empresas locales que compren software uruguayo.

—Fomentar la exportación es otro de los temas que usted puso sobre la mesa, ¿cómo lo hará?

—Entre otros proyectos, queremos crear una aceleradora de exportación con expertos de internacionalización, para que las empresas salgan por lo menos a un mercado. Para ser más competitivos pediremos que el Estado firme más acuerdos de libre comercio con otros países.

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