Uruguay logró acceder con carne vacuna de alta calidad, refrigerada y sin cuotas al mercado ruso, una nueva alternativa para valorizar la producción que llega a más de 128 mercados con las más altas exigencias.

La noticia trascendió ayer, tras la primera reunión de la Comisión mixta Uruguay- Rusia para la contribución al desarrollo de las relaciones económicas comerciales.

El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre, recordó la importancia que tiene el mercado ruso en la exportación de alimentos uruguayos. "Cuando Rusia ingresó a la Organización Mundial de Comercio se estableció un proceso de definición de carne de alta calidad. Recordemos que en 2011 y hasta 2012, Rusia representaba entre 24% y 25% de la exportación de carne vacuna uruguaya", explicó Aguerre. Hoy Rusia está entre 10% y 15%, por lo que el secretario de Estado consideró que "tener acceso comercial sin estar restringido a cuota en el segmento de carne de alta calidad refrigerada, es para Uruguay una formidable oportunidad comercial".

Rusia es un importador de carne bovina uruguaya para industria y menudencias de la especie, pero esa carne se exporta congelada.

Entre otros avances, se analizan los protocolos sanitarios para la exportación de ganado en pie y Uruguay comienza a trabajar en la figura del compartimento sanitario de alta bioseguridad, ahora para la especie bovina. Esta figura, amparada en el código sanitario de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), acaba de ser reconocida por el Servicio Federal para el Control Veterinario y Fitosanitario de Rusia como la herramienta para colocar ganado de alta genética, garantizando que no conoce el virus causante de la fiebre aftosa.

Hace muchos años que Uruguay aspira colocar ganado en pie en Rusia, fundamentalmente animales de alta genética —tanto de razas lecheras como carniceras— pero Rusia es país libre de fiebre aftosa sin vacuna y no admite animales vacunados. Ahora, a través del compartimento bovino y basándose en la experiencia impulsada por Uruguay en la especie ovina, trazabilidad y análisis serológicos mediante, se podrá garantizar que esos bovinos que se exportarán a Rusia no conocen la fiebre aftosa.

El jefe del Servicio Federal para el Control Veterinario y Fitosanitario ruso, Sergey Dankvert, acompañado del titular del MGAP y del vice canciller, José Luis Cancela, explicó ayer tras la primer reunión de la citada comisión que "Rusia tiene como meta aumentar el rodeo bovino en un millón de cabezas en un plazo de cinco años y tenemos que conseguir los animales de algún lado. Antiguamente teníamos suministro de ganado en pie de Estados Unidos, Canadá y Australia", pero hoy no estarían comprando en esos destinos.

Los rusos también tienen interés en la producción de granos que realiza Uruguay y ahí también hay acuerdos.

En materia de lácteos se trabaja en la ampliación del listado de industrias lácteas interesadas en exportar a Rusia manteca y quesos.

Rusia es el principal importador de manteca uruguaya y existe una larga relación comercial con industrias muy bien posicionadas.

Avanza la negociación buscando exportar vacunos en pie