El gobierno prevé emitir títulos de deuda por un total de US$ 3.522 millones entre lo que queda de este año y 2018, según se desprende del informe "La estrategia de financiamiento y administración de la deuda del gobierno central" que acompaña el proyecto de ley de Rendición de Cuentas.

Allí se estableció que "las necesidades totales de financiamiento del gobierno central para el año en curso ascienden a US$ 3.234 millones, de los cuales US$ 1.521 millones corresponden al pago de intereses y US$ 1.625 millones a pagos de amortización de capital". A su vez, "para el año 2018 el gobier-no estima necesidades de financiamiento por US$ 3.364 millones, de los cuales US$ 1.689 millones corresponden al pago de intereses y US$ 1.717 millones a pagos de amortización de capital", añadió.

En el reporte se indicó que los recursos saldrán de diversas fuentes. Por un lado la emisión de deuda aportará US$ 2.250 millones este año y US$ 2.750 millones el año próximo. Como "en el primer semestre del año en curso el gobierno lleva emitido el equivalente a US$ 1.478 millones —de los cuales US$ 1.250 millones han sido emitidos en el mercado internacional—", le quedan por emitir US$ 772 millones en lo que queda del año, según el programa previsto. Ese remanente, más los US$ 2.750 millones que prevé colocar el año próximo, hacen un total de US$ 3.522 millones de emisiones restantes.

"Vale destacar que la totalidad del financiamiento obtenido hasta el momento en el mercado de capitales ha sido en moneda nacional", señaló el informe.

Para completar el financiamiento este año, el gobierno prevé que los organismos multilaterales desembolsen US$ 350 millones, estima que usará reservas por US$ 452 millones y otros no especificados por US$ 182 millones.

En 2018, el financiamiento se completará con US$ 300 millones de créditos de organismos multilaterales, US$ 212 millones de uso de reservas y US$ 102 millones de "otros".

A su vez, el gobierno recordó que "evalúa someter para consideración del Parlamento un proyecto de ley que busca crear una nueva unidad de cuenta —distinta de las ya existentes, como ser la UR— que estará indexada a la evolución del Índice Medio de Salarios Nominales, y tendrá valuación diaria", como había adelantado El País a fin del año pasado.

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