Publicidad

Medida del BCU liberará US$ 1.800: a los bancos

Compartir esta noticia
Mario Bergara: en pocas semanas del presidente del BCU ya ha tomado medidas.
Conferencia de Mario Bergara y Fernando Lorenzo por medidas del gobierno para permitir la suba del dolar y controlar la inflacion, en el MEF, ND 20130606, foto Julio Barcelos - Archivo El Pais
Archivo El Pais

Con un contexto que cambió y una desaceleración del crédito bancario, el Banco Central (BCU) resolvió ayer iniciar un proceso gradual para poder eliminar los llamados encajes marginales desde el 1° de enero de 2016.

Esta medida había sido adoptada el 11 de mayo de 2011 y tenía como objetivo contener la inflación (que estaba en 8,34%) y evitar el ingreso masivo de capitales especulativos de corto plazo.

Los encajes marginales son el porcentaje de los nuevos depósitos (desde junio de 2011) que las instituciones deben inmovilizar en el BCU y por tanto no pueden utilizar para dar créditos. Son diferenciales para los ahorros en pesos y dólares.

A su vez, el encaje habitual será elevado de 18% a 26% para los depósitos en dólares a la vista y a plazo de hasta 180 días y de 14% a 20% para plazos superiores. Eso implica que de cada US$ 100 que tienen los bancos en depósitos de familias y empresas, deberán inmovilizar US$ 26 y US$ 20 respectivamente que no pueden destinar a créditos.

El efecto neto es favorable a los bancos, ya que contando los encajes marginales (que llegaban hasta 63%), la tasa efectiva actual es de 34%, mayor a la que quedará con el nuevo régimen.

Por ello, los bancos tendrán liberados entre US$ 1.600 millones y US$ 1.800 millones (en todo 2016) según una estimación primaria y tomando como base los depósitos que tienen los bancos a la fecha, dijo a El País el socio de la consultora CPA Ferrere, Bruno Gili.

En tanto, los encajes en pesos no tendrán grandes cambios, ya que la suma del habitual más el marginal es de 23,9%, mientras que el nuevo encaje habitual a partir de 2016 pasará a ser de 23% (desde 15%) en el caso de los depósitos a la vista.

El economista Aldo Lema dijo a El País que "en el corto plazo, el efecto será poco significativo, por la gradualidad de la implementación de la medida. Hay un intento por simplificar y concentrar el manejo monetario y crediticio en dos instrumentos: el M1 ampliado (cantidad de dinero que circula y depositado) y los encajes habituales".

Para Gili, la medida es "razonable" porque casi todo el dinero que queda liberado para los bancos es en dólares con lo que no afecta la inflación. Además, la mayor parte del crédito al consumo es en pesos.

El gerente general adjunto del Scotiabank, Horacio Correge dijo a El País que se analiza el efecto. "En principio y a corto plazo va a ir aumentando en forma gradual la disponibilidad de dólares en la plaza local, lo que podría tener efecto sobre la cotización (a la baja)", afirmó.

Otro ejecutivo bancario dijo a El País que es una "buena noticia" porque los encajes marginales penalizaban más a los bancos que intentaban crecer.

Es difícil que vayan a crédito.

Un ejecutivo bancario dijo a El País que seguramente los dólares liberados vayan a colocarse al exterior y no a crédito. "La liquidez en dólares no es una restricción para dar crédito", apuntó. De todas maneras, aún los bancos no ganarán dinero porque por los encajes el BCU les paga 0,15% lo mismo que obtendrán en el exterior hasta que suban las tasas.

El eterno femenino de una imaginativa pintora
Mario Bergara: en pocas semanas del presidente del BCU ya ha tomado medidas.

Decisión ante cambio de escenario y desacelere del crédito

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad