El nuevo proceso penal que comenzará a regir a partir de 2017 fue objeto de distintos análisis por parte de especialistas del derecho de Argentina, España y Uruguay, en el marco de un seminario internacional organizado por la Universidad de la Empresa (UDE)

Bajo el título“Los desafíos del nuevo proceso penal en Uruguay”, la Facultad de Ciencias Jurídicas de la UDE organizó un seminario internacional con la participación de destacados especialistas de Argentina, España y Uruguay, quienes analizaronlos alcances y la trascendencia de los cambios que, a partir de 2017, se introducirán en el proceso penal en nuestro país, así como la experiencia internacional en la materia.

La apertura estuvo a cargo del presidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Chediak, quien destacó las garantías del proceso penal uruguayo.También aportó su visión el fiscal de Corte y Procurador General de la Nación, Jorge Díaz,

En tanto, el fiscal de la Corte Suprema de España, Álvaro Redondo Hermida analizó las distintas aristas de la argumentación jurídica en el juicio oral en materia penal, mientras que el embajador de Argentina en Uruguay, Guillermo Montenegro, presentó la experiencia argentina en el proceso oral en materia penal..

Por su parte, el ex funcionario judicial de la República Argentina y profesor universitario,Dr. José Luis Puricelli, desde su experiencia analizó la actuación de los profesionales del derecho en un juicio oral en el derecho penal.

La reforma del proceso penal, entre otros aspectos, implica un cambio radical de pasar de un sistema inquisitivo, que se abre con una etapa reservada de presumario, a diferencia de un sistema acusatorio, que se basa en el juiciooral, público e inmediato desde el inicio. "El juicio penal oral y público es una garantía para la igualdad entre las partes, la reserva del expediente está prevista sólo en casos execpcionales", dijo Puricelli.

Tanto el fiscal como la defensa con la reforma penal proyectada se encuentran en igualdad de condiciones, aunque "lógicamente el Estado tiene la ventaja porque tiene todo el aparato público a su disposición", explicó el experto argentino.

La oralidad y publicidad de los actos también encierran una mayor transparencia del proceso penal frente al sistema inquisitivo. "La prensa ya no se tiene que manejar con las fuentes o los corrillos de los tribunales para conocer en detalle el avance del proceso penal en un caso concreto porque puede asistir a las audiencias, que son abiertas y públicas", destacó Puricelli.

"El juicio penal oral y público fortalece aún más el Estado de Derecho y el sistema democrático, lo cual va a ser bien recibido en Uruguay que tiene un gran prestigio internacional por la estabilidad de sus instituciones democráticas y su reconocida tradición en defensa de la libertad, y con un proceso inquisitivo había una deuda enorme de Uruguay con esos valores y la garantía de los derechos republicanos", concluyó Puricelli.

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