Luego de haberse operado al alza en las cinco semanas previas, el tipo de cambio finalizó la semana pasada en el mismo nivel del viernes anterior, alternando entre alzas y bajas, y moviéndose al influjo de la evolución internacional de la divisa estadounidense, principalmente en Brasil.
El promedio de las compraventas interbancarias del viernes se efectuaron a $ 28,478, con lo que finalizó el séptimo mes del año con un incremento "punta a punta" de 5,39%, el más pronunciado desde mayo de 2013. Esto supuso, además, el octavo mes consecutivo de avances, la racha positiva más prolongada desde abril de 2004. En el año acumula un alza de 17,03%.
Por su parte, el Banco República (BROU) incrementó un 0,35% la cotización al público entre lunes y viernes hasta $ 28,10 y $ 28,90, compra y venta respectivamente. La variación mensual fue de un avance de 5,28%.
A través de las pantallas de la Bolsa Electrónica de Valores (Bevsa) se operaron US$ 211 millones en la semana y durante julio US$ 508,9 millones.
El mercado cambiario local volvió a estar muy atento a los movimientos del billete verde en el exterior durante la semana pasada, y actuó en función de ellos.
La volatilidad del billete verde en Brasil continuó afectando, aunque en forma más limitada, las expectativas de los operadores locales.
De hecho, el dólar en el vecino país dio un salto semanal de 2,32% hasta los R$ 3,4247, un nuevo máximo desde abril de 2003. A su vez, en julio subió un 10,16% y en el año ha avanzado un 28,81%.
El Banco Central (BCU) volvió a intervenir la semana pasada en el mercado cambiario local, vendiendo al contado un total de US$ 15,5 millones.
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