La inestabilidad de Brasil podría generar presiones adicionales de volatilidad en el mercado local.

El tipo de cambio parece haber encontrado cierta estabilidad, al menos es lo que se desprende del comportamiento de las últimas semanas, en las que se ha movido dentro de un rango de precios que va desde los $ 31,50 hasta $ 32, encontrando resistencia cuando se acerca a cada uno de dichos límites, es decir, aparecen compradores cuando baja y vendedores cuando sube.

No obstante, la semana pasada tuvo una clara volatilidad dentro de dichos límites, y se espera se mantenga durante esta semana, con sesgo bajista.

Varios son los factores que generan dicha expectativa entre los operadores cambiarios consultados por Economía & Mercado.

En primer lugar, hay buenos niveles de liquidez en el mercado local, lo que reduce la necesidad de vender divisas.

En este contexto, los agentes aprovechan la volatilidad para efectuar operaciones de "trading", comprando cuando baja y vendiendo cuando sube, obteniendo así una ganancia.

Además, esta semana tendrá la particularidad de que el Senado de Brasil definirá el futuro político de la presidenta Dilma Rousseff, con su lógica implicancia sobre el mercado accionario y cambiario de ese país. Los agentes locales seguirán de cerca la evolución de la divisa estadounidense esta semana, lo genera un factor adicional de volatilidad.

Por su parte, se está dando una mayor disposición a adquirir títulos en pesos.

EL CIERRE