Periodista deportivo
—¿Cuál fue su mayor atrevimiento en la vida?
—Vender panchos en el kiosco enfrente de mi colegio. Así conseguía algún peso y almorzaba.
—¿Cuál es su asignatura pendiente?
—Ir a un partido de la NBA, de béisbol y de fútbol americano.
—Si no fuera usted, ¿quién gustaría ser?
—Francis Mallmann.
—¿Qué no perdonaría?
—Que el flan venga sin dulce de leche.
—Si luego de muerto reencarna, ¿en qué persona o cosa sería?
—Me gustaría volver a la época del lejano oeste y ser algún vaquero. Raro, pero cierto.
—¿Y si fuera un personaje de ciencia ficción?
—No tengo dudas, uno de Steven Segal.
—¿Qué persona viva le inspira más desprecio?
—Maduro.
—¿Y a qué persona viva admira?
—Federico Hoppe.
—¿Qué frases usa más?
—"Te lo juro por mis hijos". Y aún no tengo.
—¿Cuál es su idea de la felicidad perfecta?
—Un buen copetín, las patas cerca de la estufa de leña y que Uruguay le gane en la hora a Brasil con un gol en contra.
—¿Cuál es su mayor remordimiento?
—Tengo miedo de haber hecho mucho bullying en el colegio...
—¿Cuándo y dónde ha sido más feliz?
—Cuando se termina el día y me acuesto con mi mujer en la cama.
PROUST EL PREGUNTÓN