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Tres coreógrafos buscan lo nativo

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El BNS en manos de creadores emergentes.

Tres coreografías diferentes darán cuerpo a este nuevo espectáculo del Ballet Nacional Sodre, que ayer de noche dio una función especial a beneficio, y que se estrena hoy para luego quedar en escena hasta el domingo 23 del corriente.

Se trata de Episodios nocturnos coreográficos, producción que incluye los trabajos de tres coreógrafos de las nuevas generaciones: el argentino radicado en Alemania Demis Volpi, y los uruguayos Martín Inthamoussu y Andrea Salazar.

Como todas las temporadas, Julio Bocca, director del BNS, busca que uno de los programas sea de corte experimental, buscando además promover la emergencia y desarrollo de los coreógrafos locales, que aporten creaciones que den cuenta de este siglo XXI. Pero en este caso, además, se trata también de una mirada al pasado, dado que el BNS inspiró este trabajo en la primera obra que la compañía creó, allá por 1935.

Además, en este caso se han buscado duplas fuertes de coreógrafos con músicos. Así, Salazar ha trabajado codo con codo con Luciano Supervielle, mientras que Volpi lo hizo junto a Christos Hatzis, e Inthamoussu con Juan Campodónico. Salazar eligió para su coreografía temas realizados por Supervielle para Bajofondo, buscando contar en pocos minutos una pequeña historia. Según la coreógrafa, "la música de Luciano Supervielle tiene la capacidad de meterte en diferentes estados: esos estados era lo que yo quería trabajar, los diferentes estados de las personas. Fui cambiando los climas a lo largo de la obra y uniéndolo con la parte audiovisual con la ayuda de Miguel Grompone".

La primera parte cerrará, luego del trabajo de Salazar, con el aporte de Volpi, un coreógrafo joven que trabaja para el Ballet de Stuttgart, y que ha destacado como una de las revelaciones del panorama actual europeo. Por su parte, la dupla Campodónico-Inthamoussu ofrecerá la coreografía del segundo tramo del espectáculo, por medio de un trabajo que comienza evocando la vida urbana y luego la proyecta hacia el medio rural autóctono, rescatando desde sus sonidos hasta su ambiente natural.

Bocca remarcó la importancia de este tipo de espectáculos para el BNS, dado que esta veta experimental hace crecer a la compañía otro de sus aspectos: "Es importante contar con producciones locales que traten de temas de esta cultura, obras más personalizadas", entre otras cosas porque es lo que más le solicitan a una compañía cuando viaja al exterior. Va todos los días, menos lunes, siempre a las 20 horas, menos los domingos que va a las 17 horas. Entradas en Tickantel, desde $ 150 a $ 790.

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