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Un teatro romano trae su historia y vínculos al Solís

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Emma Carelli parte para Buenos Aires en 1903.

El Teatro Solís prepara una exposición que seguramente dará que hablar. Lo hace junto a la Embajada de Italia, y tratará sobre los vínculos escénicos que se entrelazaron entre el Teatro dell’Opera de Roma y los teatros de América Latina en los primeros decenios del siglo XX. La exposición se abrirá el 15 de agosto en simultáneo con el estreno de la ópera L’elisir d’amore, de Donizetti, en la recién bautizada Sala Estela Medina, del Solís. Irá hasta el 15 de octubre con entrada libre.

La exposición estará constituida por paneles con textos en italiano, español y portugués, en los que su ubica al visitante en la rica historia escénica del período, cuando las compañías de teatro, ópera y variedades llegaban una tras otra desde la península itálica hasta el Plata, muchas veces incluyendo Río de Janeiro también como punto las giras. La muestra tendrá también vestidos de escena y muchos documentos originales de la época, como afiches, programas de mano, fotografías, bocetos y partituras.

En el correr de su más que centenaria actividad, el Teatro dellOpera de Roma ha tenido un rol importante en la difusión del arte lírico en el exterior, en particular en América Latina. De hecho, en el período comprendido entre el 1900 y el 1928, el teatro, que por entonces se llamaba Costanzi, organizó anualmente las temporadas líricas del Municipal de Santiago de Chile, del Coliseo y Colón de Buenos Aires, del Municipal de Rio de Janeiro y de algunos otros teatros de la región, el Solís incluido.

Sorteando los altibajos de orden financiero, las temporadas líricas se continuaron realizando con enorme éxito, llevando a la escena obras del gran repertorio, como Aída, Tosca, Rigoletto, Cavalleria rusticana y El Barbero de Sevilla, junto a obras de autores locales, interpretadas por los artistas más famosos del melodrama, como Enrico Caruso o Beniamino Gigli.

Con la curaduría del Archivo Histórico de esa gran sala teatral romana, que seleccionó de su voluminoso patrimonio documental bocetos, figurines, vestidos, fotografías, posters, artículos de prensa y testimonios sonoros de la época, la exposición buscará traer a la luz la estrecha relación que por tantos años unió las dos orillas del Atlántico y el incansable espíritu de la compañía del teatro Costanzi, que consiguió superar miedos, obstáculos, dificultades: ni siquiera el inicio de la Primera Guerra Mundial logró detenerlos.

La muestra se realiza con la colaboración del Ciddae (Centro de Investigación, Documentación y Difusión de las Artes Escénicas), del Teatro Solís, y será inaugurada a las 19:00 horas.

Ese mismo día subirá a escena la ópera, que dará dos funciones más, el 17 y 19 de agosto, siempre a las 20:00 horas. La dirección musical estará en manos del maestro Martín Jorge, y la puesta en escena corrió por el recientemente fallecido artista argentino Sergio Renán, actuando como repositora de escena Florencia Sanguinetti. El papel de Dulcamara correrá por cuenta cantante del uruguayo de proyección internacional Erwin Schrott.

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