Se las ve brillar en cada ceremonia pero su proceso de producción no es nada simple. Este año, los galardones llevarán una forma más robusta y volverán a producirse con el material con que fueron fabricados por primera vez.

En estos momentos, en una fábrica de un área rural de Nueva York se está creando la estatuilla que recibirán los ganadores de los premios Oscar en la famosa ceremonia de premiación de la academia estadounidense este 26 de febrero. En sus orígenes, los primeros premios eran esculpidos a mano y tallados, pero hace tres años los moldes de cera se diseñan e imprimen en 3D.

Para intentar hacerlos más parecidos a los originales de 1928, un grupo de diseñadores decidió fabricarlos de bronce, en vez de estaño y oro. A pesar de contar con nuevas tecnologías y formas de producir, aún no hay máquina que permita guardar un buen secreto. Por eso, se produce exactamente la misma cantidad de estatuillas que nominados.

De esta forma se preserva el secreto de quién recibirá el galardón en cada categoría. Tampoco sería posible saber cuánto cuesta uno de estos premios, y este es uno de los secretos mejor guardados dentro de la cocina de los Oscar

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