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Algo más de 200 personas visitaron la Quebrada de los Cuervos en Treinta y Tres, por el "Patrimonio + 1" del fin de semana pasado, destinado a conocer el patrimonio natural del país. En Cabo Polonio y Laguna de Rocha hubo unos 350 visitantes.

El "Patrimonio + 1", organizado por el Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP), se realizó el sábado y ayer. Hubo actividades en Canelones, Rocha y Treinta y Tres. Estaba previsto una visita al Parque Nacional Esteros de Farrapos y a las islas del río Uruguay, pero no se efectuó debido a que el cauce está muy crecido.

El sábado fue una jornada de recuperación de las dunas en Pinamar y La Floresta en el departamento de Canelones. En Rocha hubo recorridos por la Laguna de Rocha y Cabo Polonia y en Treinta y Tres el escenario de la actividad fue la Quebrada de los Cuervos.

En Treinta y Tres un encuentro de estudiantes de medicina acaparó la atención en un fin de semana de mucho movimiento también en los establecimientos turísticos privados.

Una delegación procedente de Rocha formó parte del intercambio, en el marco del "Patrimonio +1". Alrededor de 40 visitantes tuvieron la posibilidad de realizar un recorrido por el trayecto en la Quebrada de los Cuervos del área de la Intendencia, acompañados por los guías y guardaparques.

Pero además, al tratarse de un fin de semana largo, por el feriado de hoy, también hubo visitantes que llegaron por sus propios medios a conocer el área protegida. Tanto el camping como las cabañas tuvieron una buena ocupación desde el viernes pasado.

Pero la mayor concurrencia al área durante el fin de semana fue por la convocatoria del Congreso de Practicantes de Medicina. La actividad concitó la presencia de un numeroso grupo de estudiantes, junto a sus docentes, la comisión organizadora y un amplio equipo de apoyo, que incluyó personal de la Armada y del Ejército.

Se han realizado 14 congresos de este tipo, pero este, en la Quebrada de los Cuervos, es el primero en el medio rural. La vedette del "congreso es el desarrollo de ejercicios de emergencia en la Quebrada de los Cuervos, un medio muy hostil, donde tenemos que poner al máximo todos para que las cosas salgan bien y donde la capacidad física se ve bastante desafiada", dijo Álvaro Dendi, uno de los estudiantes que participa del congreso.

Hubo otras actividades específicas sobre la zona, como la que ofreció Carlos Prigioni sobre la fauna de la zona y puntualmente los ofidios, arácnidos e insectos que podrían ocasionar situaciones de riesgo.

ROCHA. Alrededor de 50 ciudadanos ingresaron a la Laguna de Rocha el fin de semana pasado, mientras que en Cabo Polonio ingresaron unas 300 personas, entre ellos un grupo de alrededor de 40 jóvenes proveniente de un colegio de Montevideo, pero no todos por el "Patrimonio + 1".

El paisaje protegido de la laguna de Rocha reúne una comunidad de pescadores artesanales, un refugio para las aves migratorias que llegan desde Alaska, Canadá.

Héctor Caymaris, reconocido guardaparques de esta zona, informó que todo el equipo participa de los paseos guiados y también apoya a quienes no estén integrados a las actividades en grupo.

En diálogo con El País, en pleno cordón dunar entre la laguna y el océano Atlántico, indicó que esta región es de las más importantes en materia de aves en el mundo entero. "Reúne a más de 250 especies de aves, prácticamente la mitad de las que tenemos en Uruguay", afirmó. En esta zona hay flamencos, cisnes de cuello negro, gansos blancos y corcorova, el chorlo cabezón y el canela.

El chorlo canela es uno de los ejemplos más emblemáticos de las aves migratorias que están en la laguna de Rocha. "Ya están llegando tras haber transitado por más de 12.000 kilómetros provenientes del norte de Canadá. Los científicos primariamente pensaban que demoraban varios meses pero se comprobó que no es así", dijo y agregó que los investigadores, mediante un sistema de fotos georeferenciadoras, lograron establecer que ese viaje no tarda más de 10 a 15 días.

"Los chorlos en su viaje aprovechan las corrientes térmicas, vuelan a gran altura y prácticamente sin descanso", comentó. "Sus reservorios de grasa se agotan durante el viaje y llegan acá a la laguna de Rocha completamente agotados", señaló.

La laguna de Rocha en su cauce normal tiene unas 7.200 hectáreas, pero puede alcanzar un espejo de hasta 14.000 hectáreas con las consecuentes inundaciones y los campos anegados. Cuando hay grandes crecientes aumenta su superficie al doble y su manejo, desde hace mucho tiempo, es a través de la mano del hombre que regula su salida hacia el océano Atlántico.