Publicidad

Argentina y Brasil al cruce de almagro

Mercosur polémico. El canciller admitió que no estaba de acuerdo con el ingreso de Venezuela, pero que Mujica aceptó por presiones de Cristina y Dilma. Los socios mayores reaccionaron

Compartir esta noticia
 20120702 537x600

Argentina y Brasil se unieron ayer para negar la versión del canciller Luis Almagro de que Uruguay se vio forzado por los dos grandes del bloque para aceptar el ingreso de Venezuela en el Mercosur.

La reacción del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner vino a través de un comunicado de la Cancillería argentina, en tanto Brasil respondió por medio del asesor presidencial en asuntos internacionales de Dilma Rousseff, Marco Aurelio García.

Almagro dijo ayer que Uruguay estaba en contra del ingreso de Venezuela como socio pleno del Mercosur "en las actuales circunstancias", y reconoció que tiene dudas sobre la legalidad de la resolución adoptada por los presidentes Fernández, Rousseff y José Mujica en la cumbre de Mendoza de la semana pasada. De todos modos, Almagro dijo que Mujica hizo "lo correcto", tras ceder en este punto a los planteos de sus pares de Argentina y Brasil.

El canciller dijo que Uruguay optó por no ejercer su poder de veto para no "bloquear a la mayoría". "No era que apoyáramos o no apoyáramos. Es que no vamos a bloquear a la mayoría en este proceso", declaró.

Sin embargo, los gobiernos de Argentina y Brasil salieron al cruce de Almagro y negaron que hayan ejercido presión sobre Uruguay.

La Cancillería argentina emitió un comunicado en el que señala que "el ingreso de Venezuela como miembro pleno del Mercosur fue una decisión unánime de los presidentes de la Argentina, Brasil y Uruguay durante la Cumbre de Mendoza".

"El día viernes, luego de una reunión de Dilma Rousseff, Cristina Fernández de Kirchner y José Mujica, donde escucharon las posiciones de sus cancilleres y los asesores jurídicos de los gobiernos de Brasil y la Argentina, los presidentes resolvieron el ingreso de la República Bolivariana de Venezuela en una reunión a solas", sostiene el comunicado oficial.

"El análisis de los asesores legales presentes también fue unánime en que el ingreso de Venezuela cumple estrictamente con los tratados del Mercosur y las legislaciones nacionales de los países partes", señala.

Y remata: "La resolución aprobando el ingreso fue consensuada entre los cancilleres de las tres países y los asesores jurídicos y aprobada por los presidentes".

El gobierno brasileño también negó que haya ejercido presión para conseguir el ingreso de Venezuela en el Mercosur y al igual que Argentina aseguró que la decisión fue tomada de forma "unánime" por los países del bloque, según el asesor especial de la Presidencia de Brasil para asuntos internacionales, Marco Aurelio García.

"No ejercimos presión sobre ningún país, porque no es el estilo de la presidenta Dilma Rousseff hacer presión", dijo García, en una nota publicada en el sitio web de la Presidencia de Brasil. "La decisión fue tomada por los tres presidentes; fue una decisión unánime, fue una decisión que reflejó consenso político", añadió.

García incluso indicó que "la decisión de incluir a Venezuela a partir del 31 de julio fue propuesta por el presidente Mujica". "Conversé con él (Mujica) hace poco y confirmó no sólo eso, como que era la posición de Uruguay. De nuestra parte no hubo imposición o presión. Eso no corresponde al estilo de política externa brasileña y menos de la presidenta", expresó.

"NO ERA EL MOMENTO". "Para nosotros no era el momento (para el ingreso de Venezuela) y no debía implementarse en estas circunstancias y tenemos fundamentos jurídicos y políticos éticos al respecto, los cuales pusimos de manifiesto durante todo el día jueves en las negociaciones" entre los cancilleres, dijo ayer Almagro a canal 4.

"En esos términos, en esas condiciones (...) en estas circunstancias estuve específicamente en contra de que se hiciera", agregó.

La versión de Almagro coincide con las de Argentina y Brasil en que el ingreso de Venezuela se terminó de resolver en el encuentro privado entre los presidentes. Pero agregó un elemento nuevo: según dijo Almagro a radio El Espectador, el posicionamiento de Brasil "fue decisivo en esta historia".

"No sabemos cuál fue el planteo de Brasil, no me lo comentó el presidente (Mujica) después" de la reunión con Fernández y Rousseff, dijo al ser consultado sobre dicho planteo "decisivo".

El canciller relató que cuando la presidenta argentina anunció el acuerdo sobre Venezuela, él se retiró de la sala y Mujica cedió su lugar al embajador en Argentina, Guillermo Pomi, y se sentó en segunda fila. "Yo no estaba de acuerdo y sigo sin estar de acuerdo con esa resolución. No estábamos muy contentos", admitió Almagro, indicando que tiene "las mismas objeciones sobre la legalidad del procedimiento" que la oposición.

El canciller anunció que pasará "esta declaración a los servicios jurídicos del ministerio y (para) analizar nuevamente la legalidad de esta medida".

"Para mí la última palabra no está dicha sobre este tema, debemos actuar con respeto al Tratado de Asunción y a la normativa vigente porque siempre hemos defendido el Mercosur", añadió.

Sin embargo, Almagro dijo que "si uno piensa que tiene que preservar el trabajo de los uruguayos (...) el presidente hizo lo correcto en esa negociación cerrada".

"Venezuela es nuestro cuarto socio comercial, le da otra proyección internacional (al Mercosur). Si lo que procuramos es defender el trabajo nacional, el ingreso de este país es una visión estratégica de sumar más países al bloque, cosa de la cual el presidente es partidario", expresó.

El canciller no fue el único que se pronunció contra el ingreso de Venezuela. El vicepresidente Danilo Astori marcó su discrepancia con la decisión del gobierno de apoyar esta medida tras la suspensión de Paraguay, la que calificó de "muy negativa". (Ver nota aparte).

En cambio, el expresidente Tabaré Vázquez apoyó el sábado el ingreso de Venezuela al Mercosur.

RESPONSABILIDAD. En el Consejo de Ministros de ayer, Mujica asumió toda la responsabilidad de las decisiones tomadas por consenso en la Cumbre del Mercosur, tanto la suspensión de Paraguay como el ingreso de Venezuela.

Mujica abrió el Consejo de Ministros relatando lo ocurrido en la Cumbre de Mendoza. El mandatario hizo mención a las medidas sobre Paraguay y la autorización al pedido del gobierno para suscribir convenios bilaterales con otros países de la región, dijeron participantes del encuentro a El País.

Mujica además habló del ingreso de Venezuela como socio pleno del Mercosur, mencionó la necesidad de apoyar a este país como mercado para Uruguay y por su poder energético. También nombró la necesidad de acercar al bloque a países del océano Pacífico.

El presidente no se refirió a las críticas de la oposición, pero sí algunos ministros, que hicieron hincapié en que toda América Latina, aún países con gobiernos de signo ideológico distinto, estuvieron de acuerdo en el proceder respecto a Paraguay y que solo la oposición uruguaya está en contra, expresaron las fuentes consultadas.

En el gabinete, se apoyó la gestión del canciller, duramente cuestionada desde la oposición, añadieron las fuentes. Ayer circularon versiones de una posible renuncia de Almagro, tras reconocer públicamente en dos entrevistas su discrepancia con la decisión tomada en la cumbre de Mendoza. Sin embargo, allegados al ministro dijeron que no dejará su cargo. El jerarca informó que no dará más entrevistas durante esta semana.

En una conferencia de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros de ayer lunes, el prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa, explicó por qué Mujica accedió en Mendoza al pedido de las presidentas de Argentina y Brasil para incorporar a Venezuela al Mercosur, pese a que consideraba que no era el momento más oportuno y que el canciller Almagro no solo se oponía sino que también tenía dudas sobre la legalidad de la decisión.

Cánepa recordó que, en primer lugar, la posición que Mujica anunció que llevarían a la Cumbre fue no permitir que el bloque regional estableciera sanciones económicas a Paraguay, dado que lo ocurrido "no debe involucrar al pueblo" de ese país.

Explicó entonces que Mujica planteó a las presidentas de Argentina y Brasil, en segundo lugar, la necesidad de continuar con el Focem (Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur) a través del cual Uruguay y Paraguay reciben fondos aportados precisamente por los dos socios mayores del bloque.

Cánepa explicó que "el 95% de ese fondo es aportado por Argentina y Brasil", y que Paraguay "es el que pone menos dinero y recibe más transferencias", por lo que la delegación uruguaya entendía la necesidad de no interrumpir esta asistencia.

En tercer lugar, Mujica propuso que Venezuela no cortara su asistencia a Paraguay en materia de petróleo. "Uruguay planteó que se mantuviera el trato especial de Venezuela con Paraguay, que goza de un acuerdo preferencial de acceso a petróleo, con precios particulares", sostuvo Cánepa.

El jerarca precisó que, en cuarto término, el Mercosur atendió una propuesta de Mujica para que el bloque regional "se abriera hacia los países de la alianza del Pacífico", una decisión que es vista desde el gobierno como una oportunidad de "ampliar el diálogo y que no tengamos una América partida".

Según indicó el prosecretario de la Presidencia, los puntos propuestos por Uruguay y aceptados por los otros dos socios, sumado a que el ingreso de Venezuela ya había sido ratificado por el Parlamento en 2006, no ameritaban que Uruguay aplicara el veto.

Cánepa relató que todo el Consejo de Ministros respaldó la decisión del presidente de aceptar el ingreso definitivo de Venezuela.

VÁZQUEZ. La actitud zigzagueante del gobierno de Mujica con relación al ingreso de Venezuela también salpicó al expresidente Tabaré Vázquez.

El sábado en un Plenario del Frente Amplio realizado en Florida, el ex presidente respaldó las sanciones a Paraguay y el ingreso de Venezuela. En su opinión, la decisión adoptada por Argentina, Brasil y Uruguay de autorizar el ingreso de Venezuela -sin el consentimiento de Paraguay, suspendido de los órganos del Mercosur- "se dio dentro de lo institucional". "Así que está bien, es una oportunidad que se aprovechó porque institucionalmente está permitido", dijo.

Ayer lunes, el expresidente conoció que el canciller Almagro no comparte el ingreso de Venezuela e incluso duda de la legalidad de esa medida.

"Ingreso de Venezuela dejó una herida"

El vicepresidente, Danilo Astori, dijo ayer a Telenoche que el ingreso de Venezuela "de la manera que se dispuso, no fue una buena decisión y es la herida institucional más importante para el Mercosur, quizás la más importante de toda su historia, porque va al corazón del Tratado de Asunción", explicó.

Según Astori, la firma del acuerdo "es muy negativa" y "va en contra de una de las reglas más importantes del tratado, la cual implica que todos los países tienen que estar de acuerdo con el ingreso de un miembro pleno". Por lo que aseguró que "a futuro se abre una incertidumbre institucional total" en el Mercosur. Más allá de eso, Astori remarcó que respaldará a Almagro ante el llamado de la oposición.

El diputado José Carlos Mahía (Asamblea Uruguay) dijo a El País que está de acuerdo con el canciller Luis Almagro y "hubiera preferido que el ingreso de Venezuela se diera en otras circunstancias"

El diputado Víctor Semproni (Espacio 609) señaló que para permitir el ingreso de un país al Mercosur, se necesita la firma de los cuatro países del bloque. "A mi juicio, también se requería el aval de Paraguay, de acá a la reunión de Río habrá que ver si no se revisa la posición".

Almagro se reunió ayer con los senadores Rafael Michelini (NE), Enrique Rubio (VA) y Alberto Couriel, quienes le ofrecieron respaldo.

En una conferencia de prensa, la bancada del Frente apoyó al gobierno y defendió el ingreso de Venezuela, votado hace más de siete años por Uruguay. La Mesa Política se expresó en los mismos términos.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad