En otro paso más para poner en valor el monumento de Calera de las Huérfanas, quedo inaugurado un novedoso Centro de Interpretación, que recoge vestigios hallados en excavaciones realizadas hace 10 años.
La Calera de las Huérfanas es uno de los monumentos principales del oeste del departamento; recoge la historia de la antigua Estancia de Belén, pilar de asentamiento de la presencia jesuítica en el Río de la Plata. Sus vestigios se conservan como una presencia emblemática de las Misiones ubicadas al Este del río Uruguay.
Un grupo de carmelitanos inició en 1999 un proceso de recomposición que permita en diferentes etapas, ponerlo en valor. En los primeros tres años, junto a la comuna y el Ministerio de Turismo, se recogieron pipas, vasijas, guijarros, piezas de vajilla y diferentes utensilios de valor histórico.
En 2008 se conformó la Comisión Pro Calera. Con apoyo del ayuntamiento de Vitoria del Gobierno Vasco, se pasó a la etapa de ubicar carteles, pasarelas, acondicionar los parques y mejorar el entorno. El Centro de Interpretación de Calera de las Huérfanas fue el siguiente paso, a efectos de poner en relieve los elementos hallados hace una década: perfectamente acondicionados y clasificados quedaron expuestos en una sala contigua a los restos de la capilla.
En el 196 aniversario de la fundación de la ciudad de Carmelo, el sábado, quedó inaugurado este nuevo eslabón histórico. El intendente Zimmer inauguró el Centro, acompañado por figuras políticas y sociales que dieron origen a todo el movimiento.
La directora de Turismo, Mariela Zubizarreta, integrante de la ONG, dijo a El País que este es un paso más, en la puesta en valor del notable bien, que es Patrimonio Nacional. Además se creó un audiovisual que fue expuesto en la inauguración, junto con una publicación que ilustra el emblemático bien patrimonial.
Las próximas etapas de consolidación de la obra, serán la de establecer sistemas guiados para las visitas, y dotar de una infraestructura que permita brindar a los vecinos espacios para que puedan exhibir y vender sus productos caseros.
La Calera de las Huérfanas está a 16 kilómetros de Carmelo, entrando en el kilómetro 241 de la Ruta 21.
Los jesuitas se establecieron en las márgenes de los ríos Uruguay y Paraná constituyendo 32 asentamientos con 160.000 nativos guaraníes.
Para ser autosuficientes, los jesuitas instituyen una red de producción, de la cual, las estancias eran parte. "Nuestra Señora de los Desamparados" en Florida y "Estancia de Belén del Río de las Vacas" fundada en 1741 y conocida como Calera de las Huérfanas fueron las dos principales estancias.