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MADRID | EL PAÍS DE MADRID / AFP

La economía española empezará 2012 con una nueva recesión y más de 5 millones de desempleados, anunció el ministro de Economía, Luis de Guindos. La crisis ya generó que los emigrantes hayan crecido 36,6%.

Se van. Entre enero y septiembre de este año, 50.521 españoles han hecho la maleta rumbo al extranjero. Son un 36,6% más que los que tomaron esa decisión en 2010 (36.967, de los 30.418 que marcharon en los tres primeros trimestres). Así se desprende de las estimaciones del Instituto Nacional de Estadística (INE). Eso ocurre en un país donde, por primera vez en los tiempos recientes, la emigración supera a la inmigración: las llegadas, boyantes antaño, se han ralentizado este año mientras cobran auge las salidas. Es la factura de la crisis económica. Reino Unido, Francia, Estados Unidos y Alemania son los destinos preferidos.

Bajo este panorama, el ministro de Economía, Luis de Guindos, sostuvo -sin utilizar la palabra recesión- que la economía española registrará un crecimiento negativo en el último trimestre del año y un "perfil desacelerado" en el siguiente. "Seguramente en este trimestre la economía española ha tenido una recaída y volvemos a una tasa de crecimiento negativa" afirmó.

El ministro adelantó una cifra de -0,2% o -0,3% para el último trimestre de 2011 y agregó que esto "va a determinar lógicamente el perfil en el cual nos adentremos en el próximo año que va a ser un perfil relativamente desacelerado".

"Los próximos dos trimestres, que nadie se engañe, no van a ser sencillos, tanto desde el punto de vista del crecimiento como desde el punto de vista del empleo", agregó, sin precisar si para el primer trimestre de 2012 prevé un estancamiento de la economía o un nuevo crecimiento negativo.

Dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo implicarían una recaída del país en la recesión ya prevista por varios economistas.

Duramente golpeada por la crisis financiera mundial y por el estallido de la burbuja inmobiliaria, la economía española había entrado en recesión en el último trimestre de 2008 al decaer un -0,80% tras haber retrocedido el 0,2% en el trimestre anterior. En 2009 el país vio retroceder su PIB un 3,7% y después un 0,1% en 2010. Pero tras salir a principios de 2010 de una recesión de más de 18 meses, España se debate para recuperar el crecimiento desde inicios de 2011: en el primer trimestre subió 0,4% y en el segundo lo hizo un 0,2% antes de volver a cero en el tercero.

"Parece que todas las previsiones apuntan a que la recesión es el escenario más posible", dijo a AFP Daniel Pingarrón, analista de IG Markets. "En marzo 2012 con esos dos trimestres negativos podríamos hablar de una recesión real", aclaró precisando que "muchas economías de la zona euro van a tener un ritmo bastante parecido, van a registrar tasas negativas en sus productos interiores brutos".

A esto se suma un desempleo récord de 21,52 que podría afectar a principios de 2012 a más de 5 millones de personas, según De Guindos.

Bajo esta situación varios son los que resuelven emigrar. Los españoles suman poco más del 12% entre las 407.214 personas que han emigrado entre enero y septiembre de este año en todo el bloque europeo. Uno de cada tres españoles recala en la Unión Europea pero el resto elige países del resto del mundo, inclusive Argentina y Venezuela en el sur.

RETORNO. "La emigración es una sangría, pero en términos individuales salen las cuentas", afirma el demógrafo Antonio Izquierdo. Y ya no es lo que era, defiende este catedrático de la Universidad de La Coruña. "La sociedad ha cambiado y no valen los estereotipos del siglo pasado, las imágenes de los españoles que embarcaban con la maleta en el puerto de La Coruña. Emigrar ya no es algo suicida, ni arriesgado, ni traumático. El billete de vuelta cuesta 500 euros", añade. "Los españoles se van a probar fuera. No tienen problemas de movilidad, tienen cualificación e idiomas", añade. ¿Volverán? Todo depende de cómo les vaya en el país de destino y de si mejora la situación.