Un grupo de jóvenes de entre 14 y 17 años genera una situación de inseguridad "grave y urgente" en el liceo 50 de Casabó. Bandas ajenas al liceo apedrean el local, concurren con perros Pitbull y palos, roban a los alumnos y realizan picadas.
"Hablamos de violencia contra profesores y alumnos, amenazas verbales, pedradas contra la institución y contra el personal docente, rotura de vidrios, robos, quita de cables de Internet, ingreso al predio del liceo, personas que concurren a la salida de los turnos con perros Pitbull y palos, picadas en moto, entre otras situaciones de gravedad", afirman los docentes del liceo en un comunicado. Según los docentes, se trata de un problema "endémico".
El liceo está ubicado cerca del predio del ex Frigorífico Nacional, y concurren unos 600 alumnos de Ciclo Básico.
Los profesores afirman que han "agotado todas las vías de comunicación con las autoridades competentes", entre ellas el Ministerio del Interior, la Intendencia de Montevideo y el Consejo de Educación Secundaria (CES).
"La Intendencia solicitó un informe de nuestras necesidades de locomoción; el Ministerio del Interior pidió información sobre los hechos, sin traer una propuesta concreta; y el CES, lejos de responder al problema concreto, se ha preocupado más por saber si estamos de paro que por las condiciones en las que trabajamos a diario", indicaron.
Ante las "respuestas inexistentes" de las autoridades, según calificó el adscripto Mauricio Molea, los docentes resolvieron declararse "en conflicto", aunque no realizarán un paro.
"Evitamos una medida de huelga con paro por considerar que la misma, en este marco, lejos de adoptar soluciones, expone a los estudiantes a más inseguridad y violencia", manifestó el personal del liceo. La asamblea docente está integrada por trabajadores sindicalizados y no sindicalizados.
Las medidas de lucha que adoptarán incluyen movilizaciones, jornadas de sensibilización, cortes de tránsito y volanteadas en la avenida Carlos María Ramírez.
Los docentes solicitan mayor locomoción de acceso al liceo, ya que la parada más cercana está a ocho cuadras, lo que es uno de los factores de inseguridad, según el adscripto.
Además, requieren que se construya un muro de seguridad en el predio destinado a educación física, por donde entran los jóvenes ajenos a la institución. Por último, piden un guardia de policía en servicio 222 y patrullajes "sorpresivos" en la zona.
"Ya no sabemos qué más hacer", afirmó el adscripto. "Si pasa algo de aquí en más con los alumnos será la responsabilidad de las autoridades", dijo.