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V. RUGGIERO Y G. PÉRGOLA

Reclusos harán contenedores para Ancap, acondicionarán un campo donde UTE colocará molinos de viento y construirán puertas y bloques para el Plan Juntos. Aún resta que el Patronato del Encarcelado firme los acuerdos con las instituciones.

El gobierno apuesta a la rehabilitación de reclusos a través del trabajo. Unos 60 presos de Rocha, Maldonado y Canelones realizan tareas afuera de la cárcel actualmente: cada dos jornadas laborales se les descuenta una tras las rejas, ganan un sueldo y aportan para su jubilación.

Unos 100 presos más, que irán rotando, comenzarán a fin de mes a realizar tareas de desmalezamiento y limpieza de las vías férreas a través del convenio que firmó AFE y el Ministerio del Interior.

"Si el programa empieza en Rivera los reclusos van a ser de ese departamento y cuando cambie el territorio con él los presos que trabajan", comentó a El País el sacerdote Uberfil Monzón, presidente del Patronato de Encarcelados y Liberados. En poco tiempo serán muchos más los reclusos que estén inmersos en el mercado laboral por intermedio de diferentes convenios que realizará el Patronato. Algunos presos trabajarán para Ancap armando contenedores de madera para colocar productos de exportación del ente según dijo el director del Patronato, Jaime Saavedra. Esta tarea sería realizada fuera de la cárcel.

Otro grupo de reclusos trabajará para UTE en un campo donde el ente prevé generar energía eólica. En este caso la tarea de unos 300 reclusos será acondicionar el campo para la instalación de los molinos.

Se estudia la posibilidad, según pudo saber El País, de que los presos vivan en el campo en contenedores que serán adaptados como viviendas. Cada uno sería para unas 12 personas. "Aún estamos en conversaciones y no hay más aspectos definidos", aseguró Monzón y prefirió no revelar donde está instalado el campo.

A través de otro convenio con el Plan Juntos del Ministerio de Desarrollo Social, los reclusos fabricarán 10.000 bloques y 4.000 puertas interiores por mes para construir casas.

"Este trabajo es intramuros, se hace dentro de la cárcel y, a través del convenio, el Plan Juntos adquiere los productos", comentó Monzón.

El sacerdote explicó que el sueldo que obtengan los presos por el trabajo se dividirá en dos: un tercio va a la familia del recluso y el resto a una cuenta bancaria a nombre del presidiario. "Ahora también tenemos técnicos para que ellos vayan trabajando y aprendiendo. La idea es que de esta manera logren obtener títulos técnicos ya sea de mecánica, carpintería, soldadura, etc.", dijo Monzón.

Antel también evalúa darle trabajo a reclusos y recién salidos en libertad, además de ofrecer módulos de capacitación. Para todos los nuevos convenios se trabajará con una población reclusa rigurosamente seleccionada (primarios, de delitos no violentos, con presencia de indicadores de evaluación, etc.).

EXPERIENCIAS. Desde el año 2002 funciona en el país el Centro Nacional de Rehabilitación (CNR) que trabaja como un centro de pre-egreso para la recuperación de reclusos. Allí se los prepara para "el afuera" de la cárcel. Los reclusos seleccionados para integrar el CRN también son elegidos por un grupo multidisciplinario. Para acceder y permanecer en el centro, por ejemplo, es esencial la voluntad de participar de un proyecto de estas características que compromete profundamente al individuo y a su entorno social y familiar.

Muchos reclusos que estuvieron en el CNR durante su último período de reclusión, y que recientemente lograron su libertad, son incorporados a diferentes entes o servicios descentralizados. En la Administración Nacional de Puertos por ejemplo trabaja actualmente un grupo de ex reclusos.

4 Son los convenios que ajusta el Patronato de Encarcelados y Liberados a través de los cuales se le dará trabajo a reclusos.