DIEGO CASTRO
Una rapiña a un almacén del barrio Campisteguy de la ciudad de Las Piedras dejó a un comerciante de 62 años atravesado por una bala. Murió minutos después del atraco. La Policía busca a los delincuentes que serían de la zona.
A las cuatro de la tarde, tres individuos llegaron al almacén de Avenida Central 511, esquina Barrios Unidos, atendido por Hugo Tardí, de 62 años. Se bajaron de una moto de color negro que no tenía matrícula, según manifestaron fuentes policiales, vinculadas al caso.
De los tres delincuentes, dos ingresaron a cometer la rapiña. El restante se quedó junto a la moto, en la puerta del local con el motor apagado.
Según testimonios de los vecinos del lugar, corroborados por fuentes policiales, a nadie le llamó la atención que hubiera una moto con el motor apagado en la entrada del negocio porque en el lugar se vende nafta y es común ver vehículos estacionados allí.
El delincuente que permaneció afuera encendió el motor de la moto ni bien se escuchó la detonación de un disparo dentro del comercio. Tras esto, los otros dos integrantes de la banda salieron corriendo del almacén para fugar de la zona.
Las versiones no son del todo claras sobre lo que pasó dentro del local, ya que no hay testigos directos del hecho.
Tardí recibió un disparo de arma de fuego que, según fuentes policiales, le ingresó por la axila derecha y salió por el pulmón izquierdo.
Vecinos del lugar, lo trasladaron hacia un sanatorio particular de la zona, aunque murió pocos minutos después de ser ingresado.
Tras la rapiña, un móvil de Radio Patrulla llegó al lugar, donde también trabajaron efectivos de la Jefatura y de Policía Técnica.
También se hicieron presentes en el lugar el jefe y el sub jefe de la Policía canaria, Erode Ruiz y Luis Mendoza.
Aunque algunas versiones indican que los delincuentes dispararon sólo una vez, el Jefe de Policía de Canelones Erode Ruiz, dijo que la esposa de Tardí declaró que escuchó dos disparos, mientras se encontraba en el fondo del negocio. Cuando llegó al local, su esposo ya estaba en el piso, herido.
Según se pudo establecer, en base a las investigaciones realizadas en el lugar, el almacenero se habría intentado defender, con un cuchillo que fue encontrado delante del mostrador del almacén.
La esposa de Tardí le dijo a la Policía en su declaración que el cuchillo no se sacaba de atrás del mostrador porque lo utilizaban para cortar fiambre.
Además, en el lugar de los hechos se encontró una máquina tragamonedas rota, con manchas de sangre.
La esposa del comerciante declaró a la Policía que la máquina estaba funcionando, por lo que los investigadores deducen que después de recibir el disparo, Tardí cayó sobre la misma. No se confirmó por parte de las autoridades la cantidad de dinero que se llevaron los delincuentes.
"SON DE LA ZONA". En cuanto a la investigación, la Policía es optimista en atrapar a los delincuentes que cometieron este asalto. Según confiaron fuentes policiales, quienes cometieron este asesinato "son de la zona" y "no van a tardar en caer".
El jefe policial de Canelones, Erode Ruiz, manifestó a El País, que la Policía canaria esta "apostando a la prevención de este tipo de delitos".
"El martes empezamos un gran operativo de prevención en la ciudad de Las Piedras, apuntando a esos lugares donde hay un comercio al lado del otro", sostuvo Ruiz.
"Sin embargo este hecho ocurrió en este comercio, alejado del centro", concluyó.
Operativo policial en el Marconi
Unos 60 funcionarios policiales fueron movilizados en la pasada jornada en un operativo llevado a cabo en el barrio Marconi.
Según declaraciones a El País Digital de Fernando Gil, vocero del ministerio del Interior, a este operativo se concurrió con cinco ordenes de allanamiento, emitidas por jueces penales, para detener a personas que se encuentran prófugas. Estos allanamientos no dieron los resultados esperados por la Policía informó el vocero ministerial.
El propio Gil explicó que este tipo de operativos en zonas conflictivas de la capital se realizan con un importante número de efectivos, para minimizar el riesgo de agresiones a los propios efectivos. .
El vocero también dijo que este operativo no fue de saturación como los que se hacen habitualmente en zonas conflictivas de Montevideo y Canelones, sino que fue llevado a cabo concretamente para buscar a varios delincuentes prófugos.
Reclamo en el Cerro por justicia
Por segunda vez en menos de una semana, vecinos del Cerro se manifestaron en contra de la inseguridad.
La convocatoria fue realizada en la esquina de Bogotá y China, donde el domingo 3 de julio fue herido de bala William Furtado, un comerciante que falleció esta semana como consecuancia de las heridas sufridas durante la rapiña.
Un centenar de personas se reunió en dicha esquina y Luis Romero, presidente de la Asociación de Comerciantes del Cerro, fue el encargado de leer una proclama. Entre otras cosas, reclamaron al gobierno que "asuma, con inteligencia, la lucha contra la inseguridad". "Se nos prometió un país de primera y sin embargo se nos priva de una mejor calidad de vida", expuso Romero.
Los comerciantes también reclaman que el pasado 13 de mayo se le entregó una solicitud de entrevista al ministro del Interior, con más de 400 firmas y que hasta ayer no habían recibido respuesta al respecto.
Por su parte, Aurora Olariaga, vicepresidenta de la misma asociación, dijo en diálogo con El País, que la situación de seguridad en el Cerro es insostenible y que hay muchos comerciantes que "hacen horario corrido hasta las dos o las tres de la tarde y cierran porque si no los roban".
A su vez, destacan el trabajo de los funcionarios y del comisario de la Seccional 24ª, quienes "con recursos limitados hacen lo que pueden".
"La zona es demasiado grande para una sola comisaría", dijo Olariaga.
CASI UNA VÍCTIMA CADA MES
14 DE JULIO 2011 Tres delincuentes asesinaron a Alberto Muzio (63), dueño de un supermercado en La Comercial, en un intento de rapiña. También fue asesinado allí el guardia de seguridad Fabián Correa. En horas de la tarde, el comerciante Walter Uruguay Portela (66) fue asesinado en una rapiña a su fiambrería ubicada en Bogotá y República Argentina, en el Cerro.
3 DE JULIO 2011 Fue asaltada la panadería La Espiga, instalada en la esquina de Bogotá y China, también en el Cerro. Allí el dueño del local William Furtado de 36 años fue baleado en el hemitórax izquierdo. El hombre falleció el 21 de julio, tras estar 18 días internado.
23 DE MARZO 2011 El comerciante Aníbal Luna de 42 años fue asesinado en su comercio instalado en Francisco Larrobla y Capurro. Los dos delincuentes, que llegaron en una moto y efectuaron el disparo mortal, aún no fueron identificados.
21 DE ENERO 2011 En una rapiña a un almacén en Salinas Norte, Fabricio Peralta Rodríguez -de 19 años- fue asesinado por dos delincuentes. Su padre, dueño del comercio, también fue gravemente herido y su hermana recibió varias amenazas.
14 DE OCTUBRE 2010 Fabricio Amarelle de 22 años dueño del Salón "Dandy", ubicado en Camino Maldonado entre Venecia y Rafael, fue asesinado tras una rapiña al local. Eran dos los delincuentes y el caso aún no fue aclarado por la Policía.
22 DE JULIO 2010 Maximiliano Rosenberg Martínez de 27 años, repartidor de una pizzería en La Unión, fue asesinado mientras buscaba la dirección para entregar un pedido por un delincuente que intentó asaltarlo.
20 DE JULIO 2010 El propietario y administrador de taxis Jorge Newbery Campos de 54 años fue asesinado en un parking ubicado en Luis Alberto de Herrera y Joanicó por dos rapiñeros.
7 DE JULIO 2010 Sebastián Scioli de 57 años, encargado del comercio La Feria de los Tornillos, en el barrio La Unión fue asesinado por tres delincuentes. Esa misma tarde robaron dos comercios más en la zona y delincuentes fueron detenidos por los propios vecinos.