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Tensión militar por relevo de general

Ejército. El jefe de la División I cuestionó el mando de Jorge Rosales al frente de la fuerza

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DANIEL ISGLEAS/PABLO MELGAR

El relevo del jefe de la División de Ejército I desnudó una crisis en la cúpula del Ejército que tiene como mar de fondo la ley de Caducidad, además de las alegadas diferencias personales.

Luis Pérez, el general con mayor antigüedad en el servicio activo del Ejército, que comandaba desde 2009 la División I que es la más poderosa del país, fue relevado en forma fulminante por el presidente José Mujica luego de haber cuestionado el liderazgo del jefe del Ejército, Jorge Rosales, tras diferencias personales que vienen de larga data.

La División I tiene jurisdicción sobre una decena de unidades militares de Montevideo y Canelones y cuenta con lo último en equipamiento y logística. Unos 2.500 efectivos integran las unidades que hasta ayer comandó Pérez.

La asignación de la responsabilidad sobre el desfile militar para conmemorar el bicentenario del Ejército, el próximo miércoles 18 en Las Piedras, fue el elemento desencadenante de una minicrisis en la fuerza de tierra que fue zanjada con el relevo de Pérez del cargo "por razones de servicio", según informó anoche un comunicado de la Presidencia.

El choque frecuente entre Rosales y su general más cercano en términos de jerarquía pasó por diversas etapas. Primero fue el Presupuesto militar, juzgado como insuficiente por varios generales; luego la indefinición de la situación de los militares presos en Chile por el caso Berríos, y más recientemente la anulación de la ley de Caducidad y sus consecuencias posteriores.

En muchos de estos temas fueron varios los generales que en el último año y medio han objetado el comportamiento de Rosales frente al gobierno.

Desde ayer el general Pérez, que aún tiene dos años de servicio activo por delante, está sin destino y a la espera de un nombramiento.

Fuentes oficiales dijeron a El País que el Poder Ejecutivo cubrirá rápidamente los puestos en la cúpula militar, para lo cual designará al frente de la División I al general Daniel Castellá, actual comandante de la División II (San José). Este cargo será ocupado por el general Wile Putscher, quien es el director del Centro de Altos Estudios Nacionales (Calen).

Los voceros agregaron que Castellá también es candidato a ocupar la comandancia de la fuerza de tierra cuando Rosales abandone el cargo en octubre.

FALTA DE MANDO. La discusión entre Rosales y Pérez ocurrió el lunes por la mañana en la sede del Comando del Ejército. Según fuentes oficiales, Rosales se molestó con Pérez cuando le llegaron comentarios sobre críticas hechas por el entonces jefe de la División I sobre su gestión al frente del Ejército.

El episodio desencadenante ocurrió cuando Pérez se enteró que no sería él quien comandara el pomposo desfile militar que el Ejército viene preparando para la celebración de sus 200 años de vida y que Rosales había encomendado esa tarea al general Juan Saavedra, actual director de la Escuela Militar.

"Falta de mando" y "falta de responsabilidad", fueron las expresiones que usó Pérez para calificar a su superior, con las que resumió lo que piensa de él a raíz no solo de lo ocurrido por el desfile del 18 de mayo sino por su actitud ante el gobierno por los problemas señalados.

Tras el incidente, Rosales decidió aplicarle un arresto a rigor al general Pérez. De inmediato informó sobre el episodio al ministro de Defensa, Luis Rosadilla, y al presidente Mujica. Además, llamó a una reunión urgente a todos los generales para informar sobre la situación.

Rosales le dijo a Mujica que lo sancionó "porque hubo una situación de deslealtad y de falta de respeto al mando", dijeron los informantes.

El presidente Mujica dio un automático respaldo al comandante del Ejército, le ordenó a Rosales que ejecutara el relevo de Pérez pero que le levantara la sanción. "Era llover sobre mojado", reflexionó el presidente. Entendió que dejarlo sin mando de la principal división del Ejército era suficiente.

Poco antes del mediodía, Mujica se dirigió al Parlamento y se reunió con el vicepresidente Danilo Astori por algunos minutos, para interiorizarlo sobre lo sucedido. Astori citó de inmediato a los senadores del Frente Amplio para informarles y les pidió extrema reserva.

Pero la oposición volvió a quedar al margen de lo ocurrido, por lo cual elevó su protesta (ver nota aparte).

A media tarde, mientras los generales eran informados por su comandante, Mujica estaba reunido por otro motivo con el senador oficialista Jorge Saravia. En esa conversación en la Torre Ejecutiva el presidente le trasmitió su preocupación respecto a las diferencias internas en la cúpula del Ejército. "Mujica me dijo que esto se debió a una diferencia puntual de funcionamiento sobre la División Ejército I", dijo Saravia a El País.

En breves declaraciones a Montevideo portal, Pérez confirmó que se lleva mal con su comandante.

Admitió que tuvo muchas diferencias con Rosales "durante mucho tiempo. Hoy explotó esto y el comandante decidió relevarme de la División I. El tema no fue político, ni por ley de Caducidad. Son problemas de relacionamiento con el comandante y terminamos mal. Yo terminé en mi casa y él terminará en cinco meses como comandante hasta que se vaya", afirmó Pérez, en alusión a que Rosales se retira en octubre de este año.

RENUNCIA. Durante toda la jornada circularon versiones sobre la posible renuncia del general Rosales a la comandancia del Ejército, molesto por la anulación de la ley de Caducidad.

Según integrantes de la bancada del Frente Amplio en la Cámara de Representantes, Rosales le trasmitió ayer al ministro Rosadilla que estaba dispuesto a dejar su cargo debido a las "diferencias internas que mantiene con varios generales".

Rosales ha tenido un largo historial de roces con sus generales por asuntos presupuestales, de relación con el gobierno y el más reciente sobre la anulación de la ley de Caducidad.

Sin embargo, allegados al comandante Rosales descartaron a El País que se aleje del cargo por la anulación de la Caducidad.

También ayer, el Poder Ejecutivo consideró en su comunicado que son "infundados los trascendidos de prensa que indican que el comandante en jefe Rosales habría puesto a consideración su cargo".

Fuentes castrenses confiaron a El País que Rosales no cuenta con el respaldo de la mayoría de los integrantes del generalato. Agregaron que de los 15 generales Rosales se apoya en el jefe del Estado Mayor del Ejército, José María Burone y en Juan José Saavedra.

Sobre la reunión en el Comando, uno de los participantes expresó que "no hubo muchas explicaciones" de Rosales.

"Nuestra moral está muy mal, nos han pegado mucho, primero por lo de (general Miguel) Dalmao, a lo que se agrega el tema de la anulación de la Caducidad y ahora este asunto. No estamos bien, no estamos mostrando espíritu de cuerpo", señaló otro general consultado por El País.

Bonilla fue apercibido por sus comentarios

El jefe del Estado Mayor de la Defensa (Esmade), general José Ramón Bonilla, recibió una amonestación escrita por parte del Poder Ejecutivo debido a comentarios políticos que efectuó hace más de una semana, dijeron a El País fuentes oficiales.

Bonilla, un general de la Fuerza Aérea con la máxima jerarquía dentro del escalafón militar, se convirtió así en el segundo alto mando en recibir un apercibimiento del gobierno por expresiones públicas, tras lo sucedido en 2010 al jefe del Ejército, general Jorge Rosales, quien declaró a varios medios de comunicación que el Poder Legislativo debía respetar los pronunciamientos de la opinión pública contrarios a la anulación de la ley de Caducidad, aclarando que lo hacía a título de ciudadano común y no como jefe de la fuerza de tierra.

En este caso, a Bonilla lo sancionaron por haber dicho en Últimas Noticias que "si alguien dice la verdad (...) inmediatamente se lo manda preso. Entonces no puede haber verdad si hay Justicia".

Fuentes cercanas a Bonilla señalaron que la sanción lo tomó por sorpresa ya que desde hace semanas se venía reuniendo con Mujica para analizar la coyuntura militar.

Bonilla será recibido en breve por la comisión de Defensa del Senado para dialogar acerca de los lineamientos que seguirá el Poder Ejecutivo con relación al nuevo rol que corresponderá a las Fuerzas Armadas, dijo a El País el senador Sergio Abreu, que preside dicha comisión.

Bonilla se reunirá el viernes con el ministro Rosadilla para analizar distintos asuntos y temas de actualidad.

Perfil

Nombre: Luis Pérez

Nació: Trinidad, Flores

Edad: 60 años

Otros datos: Integra el arma de Artillería.

Ascendido por Vázquez

Nacido en Trinidad, el 13 de abril 1951, tiene 60 años de edad y seis en el cargo, por lo que le quedan dos para retirarse por antigüedad en la jerarquía. Ingresó a la Escuela Militar el 1º de marzo de 1966, egresando como Alférez del Arma de Artillería el 15 de noviembre de 1971. No se le conoce identidad política.

Fue ascendido al grado de general durante el gobierno de Tabaré Vázquez. Con el grado de general se desempeñó anteriormente como director del Instituto Militar de las Armas y Especialidades, Jefe de la Casa Militar de la Presidencia de la República.

El 3 febrero de 2009 asumió como jefe de la División de Ejército I, la más poderosa del país. Trascendió que no ha pensado en pedir la baja y que espera que el mando del Ejército resuelva su destino.

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